El tomate, el morrón y hasta la históricamente humilde mandarina se convirtieron en estos días en protagonistas de los más encendidos debates, a raíz de que sus precios se dispararon en pocas semanas mucho más que la inflación de los últimos meses. Por ejemplo, el kilo de tomate varía entre 70 y 190 pesos.
En ese contexto, para algunos resulta inexplicable que un kilo de morrón cueste entre 300 y 500 pesos, lo mismo que un kilo de bifes, o que llevar a la mesa una frutera con mandarinas salga $ 120, el equivalente a dos litros de leche de una segunda marca.
Al gran desconcierto que producen los precios se le suma la disparidad que se observa de una verdulería a otra, con diferencias que promedian entre el 30 y el 50 por ciento.
El cartel de una verdulería del barrio Belgrano promocionaba ayer “dos kilos de naranja a $ 80”, sin embargo, cuando alguien preguntaba interesado por la oferta, la respuesta era que el producto no es de primera calidad y que por lo general se terminaba a primera hora de la mañana.
En ese comercio, el morrón está a $ 295 el kilo; la banana en $ 85 y $ 125; el tomate a $ 189 el kg; el zapallito a $ 160 el kg; berenjena $ 110 y con relación a la papa que está a $ 30 el kg.
Del otro lado de la vía, en el barrio Pueblo Nuevo, un cartel exhibía tomate redondo a $ 180 el kilo, a diferencia de los $ 100 que se promocionaban unos de mediano tamaño, ideales para llevar a la mesa.
Otros precios de esa verdulería son por kilo: mandarina, $ 85; naranja jugo, $ 60; espinaca, $ 100 dos paquetes; rúcula o achicoria, $ 100 tres paquetes; acelga súper, $ 90 dos paquetes.
Pero si en el manual del buen consumidor está como premisa seguir en la búsqueda de buenos precios, habrá que consultar al menos un comercio más.
“Cambio de temporada”
En la verdulería Don Pablo, comentaron que el precio del tomate “se disparó” porque todavía no se cosechó el de la zona. “El aumento en general se da por el cambio de temporada y el costo de la logística. Además, el aumento del combustible influye y se ve reflejado en la mercadería”, aclaró Claudio Chasela.
“Hay mucho aumento en lo que es morrones y tomate, que en noviembre empieza a cultivarse en la región y empieza a bajar el precio. Ahora se está trabajando con el tomate del norte y el flete sale muy caro”, indicó.
“También aumentó la papa que antes era más barata, más que nada por el cambio de estación. En noviembre vuelve a cosecharse y empezará a bajar el costo”, remarcó.
Lo mismo sucede con la mandarina, que “está más alta porque es la última tanda, al igual que todos los cítricos. Cuando el producto se está terminando, siempre sufre un aumento porque no se consigue, ya que actúa la oferta y la demanda”, destacó.
“El morrón, a lo que fue el año pasado, aumentó mucho más que cuando terminó la temporada. De 200 a 500 pesos el kilo es mucho el aumento. Hoy en Junín está entre 300 y 500 pesos.
“La banana aumentó la de Ecuador, ya que se incrementó el flete (entre 95 y $120). Lo que es la nacional se consigue 40 pesos el kilo, que viene del norte”, concluyó.
“Todos los años pasa lo mismo”
De la verdulería El Vasquito, Guillermo aseguró: “En la primavera siempre pasa esto. Se termina la producción de Salta, Corrientes y empieza Junín y La Plata donde recién están sembrado. Hay que esperar hasta noviembre o diciembre cuando empiezan a bajar los precios”.
“Con la fruta pasa lo mismo: se va la mandarina, la naranja y las manzanas que son de cámara cosechadas en marzo. Todos los años pasa lo mismo”, agregó.
“Por ejemplo, ahora empieza aumentar la papa porque se termina la negra que hasta diciembre no hay y solo queda la blanca de Tucumán que se encarece por el flete”, concluyó.
COMENTARIOS