Con la presencia del bloque de Cambiemos, que dio quórum, a las 14.30 comenzó la sesión en el Senado en la que se debatirá el polémico proyecto de la oposición que retrotrae las tarifas a noviembre de 2017, iniciativa que ya fue aprobada en Diputados y que el presidente Mauricio Macri anticipó que de convertirse en ley será vetada.
En la reunión de bloques de esta mañana, el PJ y el kirchnerismo lograron que este proyecto sea el primero que se discuta en la sesión, que se espera se prolongue durante varias horas.
El lunes, en medio de intensas negociaciones entre el Gobierno y los senadores del PJ, Macri le pidió a los legisladores que sean razonables y no se dejaran guiar por "las locuras de Cristina Kirchner".
Esta mañana, Miguel Ángel Pichetto cuestionó al Gobierno por no presentar una alternativa que permitiera destrabar el conflicto planteado y admitió que la oposición busca enviarle "un mensaje político" al Poder Ejecutivo.
En declaraciones a la prensa, el titular del bloque Argentina Federal señaló que "no me gusta trabajar leyes para un eventual veto. Es un fracaso del sistema. Este es un mensaje político del Congreso para el Gobierno".
"Hay poca tolerancia social de cara a los aumentos fortísimos que se están dando no solamente en los servicios, sino en todos los insumos de la canasta familiar, el peaje, la nafta", aseguró el legislador.
Consultado sobre las críticas del Gobierno respecto a que el Congreso no debería legislar sobre temas que no le corresponden, como las tarifas, modificando así el Presupuesto 2018, Pichetto indicó que durante la reciente turbulencia económica se modificaron varias de las variables económicas. "En los últimos días se modificó todo: el Presupuesto estimaba un dólar a $20,40 y ya estamos en $25. La pauta de inflación era del 15% y va a terminar siendo de 30% como mínimo", justificó.
Con relación a los dichos de Macri pidiéndole a los senadores del PJ una actitud "razonable" y no dejarse llevar por "las locuras de Cristina Kirchner", Pichetto pidió "salir de los agravios" y "de la grieta". "Ahora hay que gestionar un proceso complejo, difícil, que va a requerir de todos", completó.
Por su parte, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, reiteró que el Gobierno "no va a dudar un instante" en hacer lo que tenga que hacer, aludiendo a lo que el propio presidente Mauricio Macri ya anticipó, que es vetar la ley.
A pesar de las negociaciones que aún persisten, la postura de los senadores del PJ es la de aprobar la iniciativa que ya tiene media sanción de Diputados, algo sobre lo que el funcionario se refirió diciendo que "tengo la esperanza de que esta situación tan irracional que está ocurriendo hoy sea sólo un mal trago y que a partir de mañana podamos seguir construyendo un mejor futuro para la gente".
En declaraciones a la prensa, el titular de la cartera del Interior dijo que "si sabemos que esta ley no se va a poner en práctica, ¿por qué no discutimos algo para la gente que sí podría ser una solución parcial?".
Además hizo hincapié que con esta iniciativa el Congreso se está tomando atribuciones que no le corresponden, como lo es fijar tarifas, y que, según agregó, "los gobernadores tampoco quieren este antecedente de que el Congreso se ponga a hacer algo que no le corresponde", concluyó.
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