El comercio en el Mediterráneo fue el que expandió el pan de pita de Grecia a Roma. Pero con el advenimiento de las ciudades, tras el fin de la Edad Media, comenzó a tomar forma este plato elaborado con harina, tomate y queso, y que es popular hasta en lugares extraños como Nuuk o Bangkok, por mencionar sólo algunos.
Sobre el origen no podemos afirmar nada a ciencia cierta. Pero tenemos certeza de que los romanos comían pizza. Era como una especie de un pan, que se devoraba rápido en la calle.
En Buenos Aires, una ciudad que tiene una masiva proporción de habitantes descendientes de italianos y cuenta con la mayor cantidad de pizzerías por habitante del mundo, la pizza se caracteriza por su masa de mayor grosor y la abundancia de queso mozzarella, "hasta los bordes, para que se dore y se gratine".
Receta para hacerla en casa
Ingredientes:
- 600 g de harina.
- 10 g de levadura fresca prensada.
- 360 cc de agua tibia.
- Una cda de sal fina.
- Una cda de aceite de oliva o girasol.
Preparación de la Pizza a la piedra:
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Colocar sobre la mesa la harina en forma de corona, hacer un hueco en el centro y colocar la levadura desmenuzada y la cda de aceite.
- Poner la sal por alrededor de la corona de harina. La sal no debe tener contacto con la levadura, o podría alterar su efecto.
- Volcar el agua tibia en el centro de la corona, sobre la levadura para ir disolviéndola con la punta de los dedos mientras se toma harina desde el centro hacia afuera. Agregar agua de a poco hasta lograr una masa bien chiclosa.
- Amasar varios minutos sobre la mesa hasta que no se pegue a las manos y tenga una textura lisa y sedosa. De ser necesario agregar más harina.
- Amasar y estrellar varias veces el bollo sobre la mesa, la idea es activar la levadura de la masa.
- Dar forma al bollo y dejar descansar tapada flojamente con un paño en un lugar templado y sin corrientes de aire, hasta que duplique su volumen.
- Desgasificar aplastando el bollo y dividir en tres o cuatro partes iguales.
- Colocar cada bollo en el centro de una pizzera aceitada y con la punta de los dedos estirar llegando bien hasta los bordes.
- Dejar leudar por unos 15 minutos más y terminarla con salsa, muzzarella, jamón o el topping de preferencia.
- Cocinar en horno de barro, solo siete u ocho minutos, dependiendo la temperatura. Tener en cuenta que si no contamos con termómetro será necesario ir controlando la cocción o pdría quemarse.
- Sacar del horno, cortar y servir.
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