Cada vez falta menos para la “nota del año” que Telefé ya empezó a promocionar en su pantalla. Es que, por estas horas, Susana estará arribando a París, la ciudad de los enamorados que acogerá la entrevista que, en una exclusiva valuada en 50 mil dólares, Wanda Nara le concederá a la animadora para hablar de su último y mega escándalo, tras descubrir la infidelidad de su marido Mauro Icardi con la China Suárez.
Tras pasar una semana junto a Marley en Miami como invitada especial de su programa de turismo “Por el mundo”, la diva de los teléfonos, junto a un séquito de 18 personas (entre técnicos y asistentes de la diva, que estará alojada en el Ritz), estará llegando hoy a la capital francesa, para comenzar a grabar un especial (se supo que se rodará durante el 20, 21 y 22 de noviembre) que dará mucha tela para cortar.
Según trascendió, mientras las dos recorran las callecitas y barrios emblemáticos parisinos, irán hablando del tema que importa más allá de los imponentes paisajes: su crisis, al parecer ya superada, con Mauro Icardi.
Y aunque habrá un espacio de living, que podría tener a la emblemática torre Eiffel de fondo, un marco de lujo para que Wanda pueda abrir su corazón y contar con todos los detalles su versión del escándalo, el especial tendría un cierre de oro, como este culebrón merece.
La idea del canal de las pelotitas es exprimir al máximo a la invitada por la que diferentes medios se pelearon y, por eso, además de un plan de recorrida por París, incluiría una “sorpresa”, una verdadera fresa al pastel.
Es que si bien cuando se negoció la entrevista, Wanda había decidido separarse y la posibilidad de que en la nota para Telefé apareciera Icardi era algo imposible, este contexto, con los tortolitos reconciliados, cambió radicalmente la situación.
Al parecer, hacia el final del especial (algunos dicen que sería de una sola emisión mientras que la señal intentaría estirarlo como chicle para que alcance al menos dos), aparecería Icardi, que, mientras rema para que esta reconciliación sea la definitiva, aprovecharía la exposición internacional que ofrecerá esa entrevista y le pediría perdón públicamente a su mujer, y madre de sus dos hijas mujeres, Francesca e Isabella, por habérsela mandado...
Desde que se desató el escándalo, en septiembre pasado, la separación de Wanda y Mauro ganó trascendencia mundial, convirtiéndose en un tema de debate que, al menos en Argentina, ayudó a los políticos para desviar un poco la atención de los asuntos más candentes.
Al principio, como se sabe, Nara descubrió un coqueteo virtual entre su marido y la China Suárez. Sin embargo, con el correr de los días, la infidelidad se tornó más oscura y pesada para la botinera que, tras buscar encontró que los “infieles” habían tenido un encuentro presencial en un hotel de lujo parisino que, para colmo, había sido “cubierto” por el marido de Zaira Nara, Jakob von Plessen. Todo mal.
Según la versión de Icardi, que había pagado los pasajes de Suárez -que estaba viviendo en Madrid- y que reservó la suite a nombre de un amigo, el encuentro con la actriz no pasó a mayores: el futbolista confesó que sólo fueron un par de besos fogosos, en tanto, por encontrarse afiebrado, no habría podido consumar.
La versión de Suárez, sin embargo, fue un poquito diferente. Al parecer, la China se habría sincerado con la mismísima Wanda, que la llamó por teléfono para preguntarle sin vueltas qué había pasado con Icardi: “Es verdad, estuve con tu marido… pero quedate tranquila que no consumamos porque no se le paró”, fueron las palabras que habrían encendido de furia a la botinera, que le prometió: “Ya te voy a cruzar”.
Con todas las mentiras sobre la mesa, Mauro Icardi, que en estas últimas semanas fue y vino de las redes sociales, plataformas que sólo utiliza por estos días para expresarle su amor incondicional por su mujer, fue perdonado por Wanda… una vez más. Ya lo había hecho antes de descubrir el encuentro presencial, pero cuando se enteró de los detalles más sabrosos para los chismosos, volvió a dejar el nido familiar.
Pero el amor es más fuerte y Nara, que en estos meses se ganó casi dos millones de seguidores en Instagram, aceptó el perdón. Los tortolitos, aprovechando la fecha FIFA, se tomaron unas mini vacaciones en Dubai, desde donde blanquearon que estaban otra vez juntos y hasta deslizaron la posibilidad de tener un chico más...
Wanda, que estaba reticente a subir fotos con su marido, accedió y, desde entonces, todo parece haber vuelto a la normalidad.
Ya regresados a París, la mediática se prepara para la gran entrevista con Susana que tendrá mucho eco. Será, claro, su versión, en tanto la otra campana, la de la China Suárez, también sonará.
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