Abuso sexual a una paciente.
Abusaron sexualmente de la mujer cuando la estaban operando.
POLICIALES

Una mujer denunció que fue drogada y violada en el quirófano del Sanatorio Güemes

La abogada de la víctima advirtió además que las autoridades del centro médico aportaron “pruebas erróneas” para encubrir la violación.

Una mujer de 27 años denunció que fue drogada y violada en un quirófano del Sanatorio Güemes en agosto pasado, después de haber ingresado por guardia para operarse por cálculos biliares. El caso salió a la luz en las últimas horas y, hasta el momento, las autoridades del centro médico no se expresaron al respecto.

De acuerdo a la denuncia de la víctima, madre de una nena y trabajadora esencial, los hechos ocurrieron el 25 de agosto pasado. Su cirujano había programado para ese mediodía la intervención a pesar de las restricciones vigentes por el coronavirus debido a la gravedad de los dolores que sufría la mujer.

Una vez que ingresó al quirófano, donde estaban el anestesista y al menos otros dos médicos hombres, le advirtieron que iban a suministrarle una droga “para que la anestesia tome mejor”, pero a partir de ese momento se sintió mareada y ya no puede recordar más nada.

La víctima perdió la noción del tiempo. Cuando despertó se sentía dolorida por lo que le dieron algunos calmantes y después de cumplir con el protocolo de reposo típico de esa operación, recibió el alta y volvió acompañada por su esposo a su casa. Recién entonces la pesadilla se hizo consciente para ella.

Los dolores no cedían con el correr de las horas y una sensación que no podía identificar aún la perturbaba. Lo peor llegó dos días después, cuando su marido advirtió que tenía marcas llamativas en las nalgas y en la cara interna de los muslos y glúteos. Fue el momento exacto en el que todo se precipitó por un espiral de sospechas y terror, que pudieron confirmar más tarde cuando la revisaron los médicos del Hospital Ramos Mejía. Efectivamente, Noelia tenía lesiones compatibles con una violación.

“Es un abuso sexual muy grosero que se llevó a cabo en el quirófano”, dijo en diálogo con TN la abogada de la víctima, Raquel Hermida Leyenda, después de remarcar que “las fotos de la mujer fueron muy contundentes”. “Tenía cicatrices de manos en la cola y moretones en la entrepierna”, precisó. De acuerdo a los análisis, además, las lesiones coincidían con un horario de evolución de 48 horas.

Por otra parte, la letrada resaltó que decidieron hacer público el caso porque el Sanatorio Güemes, ubicado sobre avenida Córdoba al 3900, aportó pruebas erróneas. “Presentó el video de una cámara de seguridad que no corresponde con el día y la hora que se operó mi clienta”, aseguró Hermida Leyenda, y sostuvo que tampoco es la primera vez que ocurre algo así en ese lugar. “Es un directorio con mucho poder, tienen un manto de encubrimiento importante”, advirtió.

Ahora la víctima está medicada por el stress post traumático y el miedo que le quedó después del hecho. “Ella es trabajadora esencial, nunca dejó de trabajar”, señaló la abogada, y concluyó: “En el lugar donde se relajó, se encontró con abusadores”. La causa quedó en manos del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Nro 47.

En tanto, desde el área de prensa del Sanatorio, informaron que no habrá comunicado oficial sobre este caso por el momento. En cambio, subrayaron que, a través de sus representantes legales, colaboraron en las dos instancias en las que la fiscalía de oficio les pidió información. La primera vez fue para solicitar la historia clínica de la paciente y la segunda para pedir las filmaciones de la cirugía.

 

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