Un gobierno insensible
TRIBUNA DEL LECTOR

Un gobierno insensible

Según el significado de la palabra insensible, se dice que es la persona que no es consciente de los sentimientos de los demás o no muestra empatía por los sentimientos de los demás. Y en este sentido, creo que el Gobierno ha entrado en un proceso de deterioro grave que, de no cambiar el rumbo, puede tener como consecuencia una mayor inequidad en la distribución de la riqueza a corto plazo, generando conflictos sociales impredecibles.

 

Me llevan a este razonamiento tres causas principales, a saber:

Una es el veto a la ley jubilatoria sancionada por el Congreso, que deja de manifiesto un grado de insensibilidad muy seria sobre un sector de la sociedad que ha sido castigado fuertemente como son los jubilados, que han visto perder su poder de compra este año de manera alarmante, perdiendo sus ingresos continuamente contra la inflación. El argumento señalado por el Gobierno es que se produciría un déficit en las cuentas fiscales de alrededor de u$s 10.000 millones si se aprobara como está. Por supuesto que nadie del Gobierno dice cómo se compone esa cifra. Realmente no creo que dar $ 13.000 a cada jubilado más por mes pueda generar un déficit fiscal.

Además, si dentro del articulado de la ley hay alguno que pueda afectar las cuentas públicas, podría el presidente haber vetado parcialmente la ley y no lo que hizo.

Por otro lado, esta semana se aprobará con seguridad en el Senado la Ley de Financiamiento a las universidades públicas que seguramente será vetada también por el Ejecutivo, generando otro conflicto con las universidades y los docente y personal no docente, los que han visto caer estrepitosamente sus ingresos.

Esta semana el jefe de Gabinete fue al Congreso y dijo que el salario de los trabajadores le había ganado a la inflación y que los jubilados habían ganado poder de compra. Por otro lado, una universidad privada que mide constantemente el índice de pobreza informó que la pobreza continúa creciendo y ya supera el 50% de los argentinos. Evidentemente el jefe de Gabinete quiere hacer creer a la opinión pública que vamos bien cuando la pobreza sigue creciendo.

La segunda es que, en este poco tiempo que lleva, este Gobierno ha mostrado un grado de falta de disciplina partidaria muy seria, ya que el presidente no se lleva bien con su vicepresidenta, algunos diputados se pelean en el recinto, hay un presidente de la Cámara de Diputados que no puede ordenar su bancada, un Senado donde el Gobierno no tiene mayoría y no acuerda con algunos partidos aliados a ir juntos en el tratamiento de algunas leyes. Evidentemente este escenario no ayuda para nada a la gestión del Gobierno, y demuestra una falta de experiencia política de sus dirigentes.   

En tercer lugar, después de más de ocho meses de Gobierno, los indicadores económicos muestran datos de caída en la actividad en casi todos los sectores, y lo más preocupante es que no se aprecian medidas tendientes a revertir esta situación. 

No obstante debemos reconocerle al Gobierno que recibió un país quebrado y lo ordenó económicamente, eliminando el déficit fiscal que nos llevaba a la hiperinflación, y está ordenando los focos de corrupción que dejó el anterior Gobierno. Pero esto, hoy, ya no es suficiente; hay mucha gente que la está pasando muy mal, por eso es necesario que se inicie un plan de reactivación que permita lograr un proceso de crecimiento para que muchos de los argentinos dejen de ser pobres.

Aldo García López
DNI 4974484

COMENTARIOS
El discreto encanto de la casta