El método pilates debe su nombre a su creador, J.H. Pilates, iniciado a principios del siglo XX, si bien ha sido en los últimos años cuando se ha convertido en una auténtica revolución como método para el cuidado de la salud y la forma física.
La particularidad del pilates reside en que es una modalidad deportiva que puede practicarse a cualquier edad, trabajando tanto el aspecto físico como emocional.
Las clases de pilates consiste en trabajar el equilibrio, fortaleciendo espalda, glúteos, piernas y brazos. Nos ayuda a recuperar el control del cuerpo y del movimiento, evitando las posturas perjudiciales para nuestro cuerpo.
Entre otros motivos, la práctica está recomendada en casos de rehabilitación muscular o problemas de espalda, ya que se trata de un método que aporta firmeza a la zona lumbar y a los músculos internos.
¿Qué beneficios aporta la práctica de pilates?
Entre otros, mejora la fuerza abdominal, lumbar y refuerza el suelo pélvico. También ayuda a ganar en flexibilidad, mejora y alivia los síntomas del dolor de espalda (o dolencias como lordosis, escoliosis), tonifica los músculos y mejora la postura.
El método pilates también mejora el control, el equilibrio, la agilidad y la coordinación corporal. Es una herramienta muy eficaz para prevenir y controlar las situaciones de estrés y ansiedad, por lo que no descartes el pilates si tienes problemas para conciliar el sueño.
Los ejercicios de pilates se realizan de manera controlada mediante una correcta respiración. Los beneficios de practicar el método no se basan en la cantidad de ejercicio que se realice, sino en la calidad de los movimientos.
Ocho beneficios de pilates en la salud
1. Lograr una mejor postura
La columna vertebral es una estructura esencial que proporciona apoyo al cuerpo y mantiene tu verticalidad. Debido a diferentes actividades de impacto o cargas pesadas, puede sufrir modificaciones. Incluso estar sentada muchas horas suele pasarnos factura.
Es muy común que las mujeres tengamos cierto grado de hiperlordosis lumbar (exceso de curvatura en la columna), que se traduce en malas posturas y dolor de espalda. La práctica regular de Pilates elimina este problema y en tan sólo 3 o 4 semanas comenzarás a notar los resultados. Al fortalecer el “centro” (abdominales sobre todo) y los músculos paravertebrales (espalda), lograrás una postura elegante, así como un aspecto mucho más atractivo.
2. Elimina el dolor de espalda
Las mujeres somos una pieza fundamental en la familia y por eso debemos cuidarnos. Conciliar la vida laboral y familiar conlleva un gasto de energía considerable, sobre todo si tenemos hijos a los que cuidar, tomar en brazos o correr detrás de ellos. Con todas estas actividades que maltratan tu columna vertebral, a menudo el resultado es un fuerte dolor de espalda.
Con la ayuda de ejercicios de pilates hechos a tu medida, tu espalda recuperará su fuerza y su forma, eliminando el dolor de espalda y sintiéndote fuerte para afrontar tu día a día.
3. Mejora el equilibrio y la coordinación
Pilates ayuda a alcanzar un equilibrio óptimo y una plena coordinación del cuerpo. Fortalecerás la zona comprendida entre la base de las costillas y la pelvis, a la que llamamos “Centro de energía” y los músculos intrarticulares que son los que dan precisión y control, mejorando tu equilibrio.
La coordinación está presente en cada movimiento de pilates, ya que no trabajas por zonas, sino que implicas la globalidad del cuerpo. Al mismo tiempo, trabajas la postura y múltiples músculos desde la cabeza a los pies. Se promueven músculos largos, delgados y fuertes, en lugar de músculos acortados y voluminosos, algo muy bueno para mantenerte esbelta y femenina.
4. Moldea y tonifica tu cuerpo de manera natural
Si estás buscando moldear tu cuerpo, reducir tu cintura, afinar caderas y muslos nada puede ser mejor que los ejercicios de pilates. Cada sesión tonifica y fortalece todo el cuerpo, sin olvidar que al mejorar tu postura, mejorará tu figura.
La personalización de la clase permite adaptarla a tus necesidades y objetivos. Si el objetivo es moldear y afinar, se realizarán ejercicios de mayor esfuerzo en áreas concretas que quieras trabajar, pero sin perder calidad y control de movimiento.
5. Cuida tu cuerpo en el embarazo
Durante el embarazo, las necesidades del cuerpo de cada mujer cambian significativamente cada semana. Las sesiones de pilates personalizadas suavizan estos cambios y te ayudan a prepararte para el parto.
Los músculos se fortalecen para sostener el útero que va aumentado de tamaño. Aumentas al final del embarazo los estiramientos y mejoras la respiración algo fundamental de cara al parto.
Durante la sesión de pilates y ha medida que aumenta tu volumen, se refuerzan ejercicios centrados en brazos, hombros, cintura escapular, espalda, caderas y piernas.
Todo esto hace que te sientas mejor durante el embarazo, mejore tu condición física para afrontar el parto y logres una espalda y brazos fuertes para dar el pecho a tu bebé correctamente.
6. Combate la osteoporosis y la osteopenia
La osteoporosis y la osteopenia son dos patologías óseas muy comunes, que mayormente afectan a las mujeres con la llegada de la menopausia. Los huesos (especialmente muñecas, caderas y zona de la columna lumbar) se vuelven frágiles.
A veces, los huesos se vuelven tan débiles que incluso una lesión leve o una caída pueden causar fracturas graves. Con el fin de evitar estas situaciones, pilates será tu mejor aliado.
La practica regular de pilates, te ayuda a tener huesos más fuertes y con mayor densidad ósea, ya que los músculos al contraerse traccionan del hueso generando más hueso.
7. Previene la incontinencia
Es muy común la incontinencia urinaria en las mujeres en diferentes etapas de la vida. Durante el embarazo y postparto aparecen muchas veces alteraciones en la vejiga, así como durante la menopausia.
No hay que olvidar que la vejiga es hormonodependiente, es decir, que influye en ella los niveles hormonales que tengamos, pero sobre todo el estado de nuestro suelo pélvico.
Con pilates refuerzas tu suelo pélvico, mejorando tu recuperación postparto y previniendo la incontinencia urinaria.
8. Hacer frente a la menopausia
La menopausia es uno de los momentos de grandes cambios físicos a los que te enfrentas durante tu vida. Tu condición física cambia, sueles ganar peso, tienes frecuentes cambios de humor, pierdes densidad ósea, etc.
Todos estos cambios pueden mejorar realizando clases de pilates, poniendo un mayor énfasis en la tonificación de los músculos del cuerpo, la respiración abdominal y la concentración.
A medida que te haces mayor, aunque conservas cierta fuerza en los músculos, pierdes masa muscular, lo que modifica poco a poco tu postura. Pilates trabaja la fuerza y el tono, permitiéndote conservar tu postura y evitando dolores musculo-esqueléticos.
Los beneficios de pilates son increíblemente buenos para las mujeres de todas las edades. Promueve el acondicionamiento general del cuerpo aumentando el bienestar y la salud, tanto física como mental de cualquier persona.
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