Tuvieron que pasar, literalmente, años para que se les den soluciones a reclamos que insistentemente planteaban los fomentistas de Cerrito Colorado Norte. Demandas que tenían que ver, principalmente, con el mantenimiento general del lugar y con el arreglo de calles que fueron atendidas en el último tiempo, lo que es reconocido por los lugareños.
Estos cambios, sumados a los avances de la obra de la autovía en la Ruta 7, le van cambiando la fisonomía al sector.
Con todo, todavía hay cuestiones pendientes de solución. Entre ellas, las más urgentes son la extensión del alumbrado público (otra deuda pendiente desde hace años) y la finalización de un trabajo de entubamiento que se comenzó algunos meses atrás.
Avances
Una de las demandas históricas tiene que ver con el mantenimiento general del lugar.
“Hoy está bien. En el último tiempo se ha logrado que vengan con más frecuencias, porque durante dos años no tuvimos ese servicio”, comenta el vicepresidente de la Sociedad de Fomento, Juan Manuel Soberano. Y agrega: “Acudimos a la Federación de Sociedades de Fomento porque nos cansamos de hacer reclamos”.
Con el tiempo, llegaron las respuestas: “Por suerte, volvimos a tener ese servicio de recolección de residuos y de mantenimiento de calles. Quedan algunas que hay que mejorar, de hecho, propusimos traer tierra y hacer los peraltes como corresponde, el mantenimiento de las cunetas y demás, aunque una parte importante del barrio ya está resuelta”.
Entre esos pedidos, se solicitó una obra de entubamiento de calles en la intersección de Carpinteros y Aconcagua “porque el normal escurrimiento de agua se hace hacia el préstamo de la ruta” y se necesitaba una intervención porque había muchos anegamientos. “Se hizo, pero a medias porque falta poner un caño más -explica Soberano- y, a su vez, necesitamos entubar Aconcagua y Las Bandurrias para que se logre el normal escurrimiento del agua”.
Otro de los avances fue la llegada de la fibra óptica, algo que se gestionó en conjunto entre los barrios Cerrito Colorado Norte y Sur, Rincón del Cielo, la zona del Gol y un sector de Villa del Parque. “En el contexto de pandemia se vio la necesidad de contar con internet como un servicio básico. Ya se empezó con el tendido, algunos vecinos del barrio del Golf ya lo tienen y ahora estamos a la espera de que llegue acá. Pero está avanzando”, se entusiasma Soberano.
El otro beneficio que se sumó en el último tiempo fue el paso del regador: “Ya que La Rufinita contaba con el servicio del regador, solicitamos si podían cruzar la ruta para que, al menos, pueda pasar por cuatro calles que son las principales, así que lo logramos. Esto ya había sido pedido hace años y ahora se consiguió”.
Alumbrado público
Hace tiempo que los residentes del barrio Cerrito Colorado Norte hacen hincapié en que uno de los principales problemas del sector es el déficit del alumbrado público. “Las luminarias que se pusieron fue gracias al aporte de los vecinos y luego el Municipio hizo la mano de obra”, señala Soberano y recuerda que esto fue hace no menos de tres años.
“Al día de hoy no se han incorporado nuevas luminarias, seguimos con las que tenemos. El barrio ha crecido muchísimo y hay muchos vecinos que las están necesitando”, agrega el fomentista: “No tenemos un cálculo de cuántas luminarias se necesitan. Hoy tenemos más de 170 familias viviendo en el sector, más allá de las quintas de fin de semana. Yo calculo que se necesitan no menos de veinte o treinta luminarias”.
Autovía
La obra de la Autovía 7 está cambiando la dinámica en el barrio ya que el tránsito se desvía por la colectora.
Y aún cuando los fomentistas resaltan que “esta es una obra muy importante para Junín”, momentáneamente se sienten “perjudicados” porque les dificulta el ingreso y egreso al lugar: “Puente del Inca se cerró de un día para otro, sin aviso previo y hoy tenemos que bajar casi sobre el semáforo para acceder al barrio. También entendemos que es una cuestión de tiempo, hasta que se termine la obra”.
La Sociedad de Fomento
El vicepresidente de la Sociedad de Fomento del barrio Cerrito Colorado Norte, Juan Manuel Soberano, señala que durante el último año y medio, por el contexto de la pandemia, “lógicamente no hubo reuniones” de los miembros de la entidad, aunque aclara que siempre se mantuvieron en contacto por medio de los grupos de WhatsApp que hay en el barrio.
Y puntualiza: “Cuando se pudo, hicimos una reunión al aire libre, en la plaza, sobre todo para informarles a todos los vecinos del proyecto de la fibra óptica y para que evacúen las dudas o consultas que pudieran tener. Luego de eso, seguimos en contacto a través de los grupos que ya tenemos armados”.
En ese contexto, Soberano cree que, si se van relajando las restricciones, podría darse otra dinámica en la institución: “La idea es que se involucren más vecinos, eso es beneficioso para todo el barrio. Por eso, consideramos que es muy importante la participación”.
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