River Plate se quedó con el primer campeonato del calendario de la Liga Deportiva del Oeste. La Loba se adjudicó con contundencia el Torneo Nocturno 2021-2022, en una campaña en la que mostró una abrumadora superioridad con respecto a sus rivales, desde principio a fin.
De la mano de Diego "Pipo" Martino como entrenador, el equipo riverplatense fue una verdadera máquina goleadora, con un total de 31 tantos anotados en todo el torneo y resultados resonantes en su ruta hacia el título, como el 7 a 3 ante Rivadavia de Junín en fase de grupos, el 5 a 1 contra Villa Belgrano en la ronda semifinal y el inapelable 3 a 0 frente a Sarmiento en la final.
Martino consiguió así revalidar como DT el título que había obtenido en la anterior edición del Nocturno, al mando de Mariano Moreno. Con La Loba, el conjunto de "Pipo" planteó un juego de intensidad y potencia ofensiva que ningún rival pudo contrarrestar.
Sobresalieron en el "aurinegro" las actuaciones del tridente de ataque integrado por el uruguayo Franco Fagundes, Jorge Abdala y Braian Pacri. Además, en el mediocampo, "Pipo" Martino contó con la garantía de la experiencia de Johny Aquino, mientras que en el banco de suplentes también dispuso de la carta de Juan Manuel Quevedo, con su amplio recorrido en el fútbol profesional.
La definición
La gran final se disputó el 4 de marzo, en el Estadio Raúl "Vasco" Barcelona, de Mariano Moreno. River llegaba con la ventaja de que, en caso de una derrota, tendría la chance de un segundo duelo, por la ventaja deportiva que le daba el haber llegado invicto a la definición.
Con el formato de doble eliminación o "doble nocaut", que implementa la Liga del Oeste para el Nocturno, La Loba tenía la posibilidad de sellar su consagración esa misma noche o disponer de un segundo partido, en caso de una impensada caída.
No fue necesaria una revancha: la "Máquina de Pipo" aplastó al Verde por 3 a 0, con un gol de cada uno de los integrantes del tridente: Pacri, a los 31 del primer tiempo; Abdala, a los 7 del segundo tiempo; y Fagundes, a siete minutos del final.
Una final contundente, a la altura del rendimiento mostrado por La Loba durante todo el certamen. Y un título más y una fiesta en las tribunas que estuvo a la altura de la imagen dejada por el plantel de Martino dentro del campo de juego.
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