Crónica de un descenso inevitable

«Los hermanos sean unidos, porque esa es la ley primera.
Tengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea, porque si entre ellos pelean, los devoran los de afuera.» Nada más fiel que este tramo del Martín Fierro para resumir un compendio de situaciones que derivaron en un impensado descenso del Club Atlético Argentino.
Allá, con los primeros calores del mes de noviembre de 1997, Argentino comenzaba a transitar un largo y duro camino hacia la Liga Nacional «A».
Inició su participación desde abajo, en el regional de clubes de basquetbol. Un viejo galpón -devenido en gimnasio de basquetbol- del club Atlético Paraná, de Zárate, a pocos metros del río del mismo nombre fue el escenario elegido por el azar del juego. Ese día Argentino ganó 99-53 e iba a jugar un total de 19 partidos, para imponerse nada menos que en 16 y salir campeón ganándole en la final a Sportivo Escobar 2-1 (89-72 en Junín el 8-12-1997).
En 1998 jugó la Liga Nacional «C» y también fue campeón. Ganó cuatro de los seis partidos y ascendió a la «B» en el mismísimo «Monumental de Nuñez» el 17-07-1998, a pesar de perder ese día con el «Millo» 82-81 pero subiendo de categoría gracias a mejor diferencia en goles a favor.
En la Liga Nacional «B» jugó solamente un año, la temporada 1998-1999, y ascendió. En total disputó 33 partidos, ganando 24 de ellos. El 9 de abril de 1999 ascendió al T.N.A. tras superar como visitante a All Boys de Santa Rosa (entonces dirigido por el linqueño Eduardo Freston) 95-84.
Jugó cuatro temporadas en el Torneo Nacional de Ascenso y en todas llegó al T.N.A. 1. La 1999-200 donde disputó 35 partidos y ganó 22 llegando a semifinales (lo eliminó Gimnasia y Esgrima La Plata 3-1). Ese año le ganó los dos clásicos a Ciclista Juninense.
Luego jugó en la 2000-2001 un total de 32 y ganó 17. Llegó a cuartos de final y fue eliminado por Ben Hur de Rafaela.
Participó de la 2001-2002 con 32 partidos, ganando 16. Llegó a cuartos de final y lo eliminó el Deportivo Roca de Mario Spada.
Finalmente disputó la 2002-2003 donde ascendió a la «A». Jugo 36 partidos y ganó 25. Ascendió en Paraná, superando a Echagüe en semifinales 3-1 (78-69 el último).
En la elite superior del basquetbol nacional jugó tres temporadas. En la primera salvó la categoría de manera angustiante, en la segunda logró acomodarse en el tramo final y la tercera fue la vencida. Un año para el olvido donde no le salieron las cosas bien y bajó al T.N.A. estrepitosamente.
Sin embargo, en un tramo de nuestro glorioso Martín Fierro, el mismo Fierro lo invita a Cruz a la aventura (al desierto liso y llano) y éste se niega rotundamente porque le dice que se va a morir de hambre.
Y Fierro le contesta: «De hambre no pereceremos, hermano Cruz. Pues según otros me han dicho, en estos campos se hallan bichos de los que uno necesita: gamas, matacos, mulitas, avestruces y quirquinchos.»
Así llegó y se fue Argentino, pero va a volver... como todos los grandes.

PABLO OMAR DESTEFANI