Por segunda rueda al hilo, este jueves volvieron a bajar con fuerza los dólares paralelos. Al igual de lo que había ocurrido en la previa, las cotizaciones que se consiguen en la bolsa bajaron, acompañadas por una nueva caída del precio del blue. El billete llegó en la calle a los $ 1.075, $ 30 menos que en su cierre del miércoles y un valor que no veía desde el 8 de enero.
El contado con liquidación bajó otro 1,8% para acomodarse en los $ 1.154 y acumula una pérdida de 7,6% en lo que va del mes. En el caso del dólar MEP, o bolsa, la reducción del precio fue más abrupta: el llamado dólar bolsa cedió un 2,6% y se ubicó apenas por debajo de los $ 1.095.
Aunque hay múltiples explicaciones para esta nueva fortaleza del peso argentino, incluida la apreciación del resto de las monedas de la región frente al dólar, la idea de "una plaza seca de pesos" puede servir para resumirlas.
Entre los inversores, la demanda de billetes en moneda local para entrar en las licitaciones del Banco Central y del Tesoro provocaron las ventas. Lo mismo ocurre con las Pymes importadoras que desde esta semana pueden acceder al mercado libre de cambios para hacerse de dólares para pagar las deudas que hayan contraido con sus proveedores en la gestión anterior.
Las brechas con el dólar oficial vuelven a contraerse: en el caso del contado con liqui, llega al 38,8%.
En el segmento mayorista, el Banco Central consiguió hacerse nuevamente de dólares, a la vez que pudo colocar US$ 1.170 millones en la licitación del bono con el que pretende cancelar la deuda con el sector importador, el Bopreal.
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