COPA DE LA LIGA

Sarmiento empató ante Boca Juniors y se llevó un punto de oro del Nuevo Gasómetro

El Verde, con más garra que juego, igualó 1 a 1 ante el Xeneize y consiguió un puntazo que le permite seguir engrosando su promedio en la lucha por la permanencia. Miguel Merentiel, en la primera etapa, abrió el marcador para el local, pero Mauri decretó la paridad definitiva en el complemento.

Sarmiento no se amedrentó en su visita al Nuevo Gasómetro de San Lorenzo y sacó un punto de oro ante Boca Juniors, ayer, por la segunda fecha de la Copa de la Liga Profesional. El cuadro juninense empató por segunda vez en su historia como visitante ante el Xeneize y consiguió una unidad más que importante que le permite seguir engrosando, de a poco, su promedio en la lucha por la permanencia.

Luego del discreto partido ante Tigre en el debut, Sergio Rondina decidió romper el molde y cambió el esquema para visitar al club de La Ribera: adentro Juan Guasone, que hizo su debut absoluto con la camiseta del Verde, por Alfredo Amarrilla. De esta manera, el cuadro visitante saltó al terreno de juego con una línea de cinco defensores, tres volantes y dos delanteros.

No obstante, esta idea pensada por el DT de Sarmiento no logró contrarrestar los avances tímidos del local. Los primeros minutos en el Pedro Bidegain lo tuvieron a Boca como claro dominador, con las pinceladas de Kevin Zenón, pero sin la claridad de Guillermo Fernández, quien nunca entró en juego.

Los de Rondina, por su parte, se replegaron en su campo y Agustín Fontana e Iván Morales Bravo, las dos referencias en el ataque, se encargaron de tapar a Jorman Campuzano y Pol. Por este motivo, los defensores del cuadro local se vieron obligados a tirar pelotazos en busca de Luca Langoni y Miguel Merentiel, quien, en una jugada asilada, abrió el marcador en la calurosa tarde del Bajo Flores.

Un envío preciso y punzante de Luis Advíncula a la espalda de Juan Insaurralde lo encontró al atacante nacido en Paysandú, Uruguay. El charrúa dejó picar el balón y de emboquillada definió ante la salida de Fernando Monetti y la desesperación de Guasone por evitar la caída de su valla, para el delirio de los 28  mil hinchas boquenses que se hicieron presentes en las instalaciones de San Lorenzo.

Tras la temprana conquista de su rival, el Verde, con más ímpetu que juego, buscó salir del asombró, pero la falta de claridad y precisión no le permitió acercarse al arco defendido por Sergio Romero. La ausencia de Sergio Quiroga y José Mauri en la creación y el nerviosismo de algunos futbolistas lo llevaron a perder una y otra vez el balón de manera repentina.

Sin embargo, el gol planchó al local y anestesió a Sarmiento, que durante gran parte de la etapa inicial careció de un volante más en la mitad de la cancha para que fuera el faro y conector de líneas. Fontana y Morales, dos llaneros solitarios en campo abierto, pelearon más de lo que jugaron y “Chiquito” Romero fue un expectante de lujo en los 45 minutos iniciales.

A los 40, nuevamente el peruano Advíncula, pieza fundamental en el ataque del elenco conducido por Diego Martínez, recibió en el vértice del área grande y, a pura potencia, aceleró para mandar un centro preciso a la cabeza de Zenón, el más claro y determinante en Boca. El volante creativo cabeceó cerca del perímetro de Monetti, que, a puro reflejo, mandó el balón al córner con su mano derecha en la segunda aproximación clara del partido y del local.

El primer tiempo en el Nuevo Gasómetro del Ciclón fue de mayor a menor y contó con la cautela de Sarmiento y el dominio sin peligro por parte de Boca, que se fue arriba en el marcador con poco y sin pasar sobresaltos.

La poca respuesta mostrada por Sarmiento lo obligó a Rondina a volver tras sus pasos y romper con la línea de cinco defensores con la salida de Guasone y el ingresó de Joaquín Gho para disputar el segundo tiempo. El surgido en las inferiores del Verde explotó el andarivel derecho y fue un artífice determinante para el empate del cuadro juninense.

En el nacimiento del segundo período, mediante una pelota parada, los de Rondina tuvieron la chance de empardar el cotejo. Una mala salida de Romero permitió que el balón quede boyando por el área chica, pero el guardameta se recuperó y capturó la pelota instantes antes de que Diego Calcaterra marque el empate con el arco a su merced.

El cambio ofensivo y de esquema le concedió más libertad a Sarmiento, que se mostró más voraz y se adelantó en el campo de juego, con la misión de comenzar a inquietar la valla defendida por el exarquero de la Selección Argentina.

Mauri, primero, y Díaz, después, intentaron con remates desde fuera del área, pero estos no tuvieron precisión y no lograron sorprender a Romero, que comenzaba a tener más acción con respecto al primer tiempo.

Sin embargo, Boca con poco casi aumenta la diferencia en el marcador. Zenón, haciéndole homenaje a Juan Román Riquelme que miraba el partido desde un palco, habilitó en más de una ocasión a Edinson Cavani, pero el Matador estuvo con la pólvora mojada ayer y sus lanzamientos no fueron certeros por Monetti, el travesaño que le ahogó su primer grito en el 2024 o el juez de línea que le cobró un correcto off-side tras anotar a los cinco del segundo tiempo.

Cuando el reloj marcaba 26 minutos, Díaz, otra vez determinante en zona ofensiva, recibió un cambio de frente de Calcaterra y centró alto al corazón del área. El envío fue peinado por Nicolás Figal y la pelota cayó en los pies del juvenil Gho, que controló con derecha y sacó un buscapié rasante al punto penal, donde apareció Mauri para decretar la paridad final en el Bajo Flores.

Los minutos posteriores fueron carentes de peligro y emoción: Sarmiento se replegó y defendió con uñas y dientes los pocos avances de Boca. A los 40, Figal sacó un derechazo que fue atajado por Monetti, pero, luego de una carambola en el rebote entre el arquero e Insaurralde, la pelota le quedó a Merentiel, que como todo tiburón, cuando huele sangre está al acecho. Sin embargo, su cabezazo no fue peligroso y salió desviado ante el cierre, desesperado, de Díaz.

El encuentro en el final entró en el terreno del "como sea", con el Xeneize intentando con centros al área buscando la altura de Cristian Lema y el conjunto de Junín aguantando y bajando la persiana para conseguir un empate ante Boca por segunda vez en la historia como visitante.

El elenco comandado por Rondina tendrá cuatro días para recuperarse y trabajar antes de recibir a Defensa y Justicia –martes, a las 19, en Junín-, con la misión de mejorar su labor futbolística y revalidar ante su gente los dos puntos importantes conseguidos en las dos primeras fechas de la Copa de la Liga.

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