La gente pasea, pero compra menos, una tendencia que crece por la situación económica.
La gente pasea, pero compra menos, una tendencia que crece por la situación económica.
CAE EL CONSUMO

“Estoy mirando”: los juninenses pasean, pero compran poco y ya ajustan gastos

En un relevamiento informal, Democracia recabó que los clientes achican gastos, buscan segundas y terceras marcas o reemplazan determinados productos o artículos. La merma en el poder adquisitivo impacta en casi todos los rubros de la economía local.

Comprar ropa, accesorios o incluso darse gustos, pasó a ser una práctica cada vez más compleja. Según un relevamiento informal de Democracia, enfocado en esos “gustitos”, recabó que se pueden ir entre 3000 y 6000 pesos por día. Sin embargo, cuando la crisis apremia es lo primero a lo cual parecen renunciar. 

Comprar un alfajor a media tarde o un puñado de golosinas sin preguntar el precio son algunos de los denominados gastos hormiga, erogaciones que parecen pequeñas, pero al final del mes representan un importante monto del presupuesto de muchas personas. 

Democracia charló con Rocío Nievas, empleada en un Kiosco sobre Rivadavia. "Bajaron las ventas, primero por la obra del paso bajo nivel, luego por la culminación de las clases y por el mismo contexto de la falta de plata". 

Si nos referimos a una merienda, Nievas destacó que "una Coca Cola chica cuesta 900 pesos, un alfajor 750 pesos promedio, las galletitas 9 de oro valen 730 pesos y una Maná chicas 600". En consiguiente, armar una merienda cuesta 1500 pesos promedio, según pudo relevar este medio. 

Nievas destacó que actualmente en el mostrador la mayoría de los productos no tienen precio: "Tenemos un cuaderno y anotamos ahí los precios, ya que no se llega a remarcar todo. Los aumentos son semanales, hay que remarcar siempre". 

Otra de las tendencias que destaca Nievas es "optar por segundas marcas, por ejemplo clientes que todos los días compraban una Coca-Cola ahora compran una gaseosa marca Pritty, lo mismo ocurre con los cigarros, un Chester de 20 unidades vale 1000 pesos contra un Marlboro que vale 1800 pesos. El cigarro suelto no conviene, vale 100 pesos por unidad". 

 

Indumentaria

En el rubro indumentaria, Democracia visitó una tienda de ropa ubicada sobre avenida Roque Sáenz Peña. Su vendedora, Lorena, manifestó que las ventas han caído: "La gente lleva lo más sencillo, remeras, bermudas. En menor medida compra jean o camisas. Por ejemplo una remera lisa arranca en 20.000 pesos, y si hablamos de una camisa tenemos que arrancar en 35.000 pesos hasta 45.000 de marca". 

En sintonía, para aquellos que buscan ropa para niños, la comerciante indicó que "un conjunto para un nene cuesta 30.000 pesos y una calza para una nena arranca en 7000". 

Por su parte, sobre las ventas de Navidad, Lorena destacó que "se vendió, menos pero se vendió o por ahí la gente compra menos que en otros años, se nota que falta plata en la calle". 

En cuanto a la venta de bijouterie y accesorios, Democracia dialogó con Gastón, dueño del local Blaque Accesorios sobre Sáenz Peña: "Vendimos para Navidad, no sé si como esperábamos, ya que la gente compró más accesorios que por ejemplo carteras o billeteras", sostuvo y agregó: "Sí hablamos de billeteras tenemos que hablar de $10.000 para arriba, hasta 15.000 pesos. Y si nos referimos a carteras, el promedio es de 30.000 pesos". 

En cuanto a la Navidad, Gastón sostuvo que "la gente en Navidad compraba accesorios, aros, pulseras y en promedio gastaban 5000 pesos por persona, más no, ahí vemos una caída en la calidad de la compra". 

 

Estrategias de anticipación

Uno de los rubros tal vez beneficiados por la estrategia de la "anticipación" en las compras son las librerías. Muchos vecinos en Navidad tuvieron en cuenta regalar para la vuelta a clases. Por ello, Democracia dialogó con Hernán Bisio, dueño de la librería sobre Rivadavia: "La gente venía antes en febrero, ahora la curva es más pareja, algunos ya en diciembre regalaron para Navidad mochilas, artículos para la escuela. Hace un par de años que la tendencia viene así, no se plancha tanto en diciembre". 

Sobre la elección de la clientela, Bisio destacó que "eligen lo más económico, por lo general. Está todo medio inestable, pero estamos trayendo lo económico, pocas mochilas premium se venden". 

En tanto, que armarse para la vuelta a clases, un padre de un nene de jardín tiene que pensar en un gasto que ronda los 30.000 y 40.000 pesos, según manifestó Bisio. "El precio incluye una mochilita, lapices de colores, cartuchera y demás", sostuvo. 

Sobre los precios, Bisio destacó que "aumentaron un 30% en diciembre y se estima que seguirán aumentando. Por eso la gente aprovechó en diciembre, tal vez con algo del aguinaldo para acercarse".

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