Tras semanas de sequía y elevadas temperaturas, las intensas lluvias registradas en la ciudad los días precedentes no solo significaron un ligero alivio para el sector agropecuario, sino que además favorecieron la proliferación de insectos, sobre todo de mosquitos, que han hecho notar su presencia en Junín y la zona en las últimas horas.
Democracia consultó a Julio Ferrero, director general de Zoonosis y Bromatología, acerca del fenómeno. El especialista detalló que ello responde al ciclo de vida propio del mosquito, que se conjugó con las condiciones climáticas óptimas, y condujo a la proliferación de los insectos.
“La mosquita pone los huevos a escasos mililitros de la superficie del agua, o a donde esta llega normalmente. Luego de la lluvia, los huevos mojados hacen eclosión y los mosquitos nacen”, explicó Ferrero.
En efecto, “los huevos pueden permanecer más de un año en esa etapa, y solo hacen eclosión cuando se dan las condiciones climáticas óptimas, que es lo que está sucediendo ahora”, detalló. Las precipitaciones registradas las últimas semanas del año no fueron suficientes para forzar el nacimiento de los insectos, por lo que los huevos se acumularon a la espera de que el agua fuera la necesaria.
Asimismo, el funcionario explicó que “el mosquito demora alrededor de una semana en desarrollarse luego de su nacimiento”, y es por ello que Junín atraviesa la invasión de los insectos.
Fumigación, “contraindicada”
A menudo, la fumigación es un proceso realizado para combatir estos insectos, en muchos casos transmisores de enfermedades y afecciones, y causantes de malestar en los ciudadanos, que aprovechan el clima agradable para disfrutar al aire libre. Sin embargo, Ferrero puntualizó que “está contraindicada, porque es imposible matar todos los mosquitos”.
Ferrero señaló que los mosquitos llegan a poner hasta 900 huevos en su vida, lo que implicaría una campaña de fumigación permanente, que atentaría contra el medio ambiente sin solucionar el problema definitivamente. Por ello, aclaró que “no se justifica” fumigar, y a menudo puede ser “contraproducente”, considerando que el insecto puede adquirir inmunidad al veneno.
Cómo evitarlos
Cabe destacar que, de acuerdo a los registros obtenidos por Zoonosis, los mosquitos que están circulando no representan un peligro para los ciudadanos. “La especie dominante ahora es conocida como ´charquera´, y su nombre científico es Aedes Albifasciatus. Son agresivos al momento de picar, pero no transmiten ninguna enfermedad”, explicó Ferrero.
En definitiva, para el funcionario, el fenómeno “no es un problema de salud pública, salvo que haya una enfermedad, lo que por el momento no se ha detectado”.
Asimismo, advirtió que “no se pueden exterminar por completo los mosquitos, pero hay formas de aplacarlos”, y detalló que es recomendable usar ropa liviana, manga larga, instalar mosquiteros, usar espirales –que son muy efectivos-, pastillas, citronella, y repelente, cuando sea necesario. Ferrero también explicó que el olor del repelente puede ser resistido por el mosquito luego de un tiempo, y por ello es recomendable usarlo en las ocasiones que lo ameritan, así como “aplicarse aquellos que contengan DEET, una droga que facilita una mayor duración del producto”.
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