Con el sacrificio de Eduardo "Wado" de Pedro de la boleta presidencial y el encumbramiento de Sergio Massa en ese lugar, era cantado que el kirchnerismo iba a hegemonizar las listas de senadores y diputados nacionales en la Provincia de Buenos Aires, el distrito que mayor cantidad de bancas reparte.
Así, después del acto fallido que incluyó un video en que el ministro de Interior anunciaba su deseo de ser precandidato presidencial, el acuerdo de cúpulas que se consumó entre gallos y medianoche catapultó su nombre al frente del tramo de senadores nacionales por la Provincia, acompañado por Juliana Di Tullio, otra cristinista paladar negro.
Para coronar la operación de pinzas, el líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, quedó al frente de la lista de candidatos a diputados nacionales, para tratar de balancear una oferta electoral que por primera vez no tiene a un integrante de pura cepa K en el binomio presidencial.
Entre los primeros quince nombres de la lista, que son los que tienen altas chances de ingresar a la Cámara de Diputados, once de ellos responden en mayor o menor medida al dispositivo de fidelidad kirchnerista.
Las excepciones son los dos nombres vinculados al albertismo y al massismo. Por el sector del actual presidente, la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, logró meterse en el segundo lugar de la lista, mientras que muy a pesar de Máximo Kirchner, el canciller Santiago Cafiero quedó ubicado en el quinto lugar.
En el caso del Frente Renovador, la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, de excelentes vínculos con los líderes del kirchnerismo, firmó en el cuarto lugar, mientras que Ramiro Gutiérrez lo hizo en el puesto 13, con muy buenas posibilidades de renovar su mandato.
La Cámpora, que deberá lidiar con el desencanto de su militancia por la decisión de sacrificar a De Pedro y al kirchnerismo de la fórmula presidencial, al menos pudo poner a cinco representantes de la agrupación entre los primeros doce nombres de la lista: además de Kirchner (1°), están Luana Volnovich (6°), Rodolfo Tailhade (7°), Matías Molle (11°) y Luciana Potenza (12°).
Y hasta el puesto 15° hay otros seis candidatos cercanos a La Cámpora y a Cristina Kirchner como el líder del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata), Mario "Paco" Manrique (3°); la dirigente del Frente Patria Grande (de Juan Grabois) Natalia Zaracho (8°); el titular de la AFIP y referente de Kolina, Carlos Castagneto (9°); la secretaria de Desarrollo Económico Sustentable del Municipio de Merlo, Roxana Monzón (10°); la directora del Banco Nación, economista y ex periodista Julia Strada (14°), y el líder del Partido Piquetero, Juan Marino (15°).
En un primer vistazo de la lista, se advierte que el Movimiento Evita y Somos Barrios de Pie, dos de los más importantes movimientos sociales del oficialismo, quedaron marginados.
El diputado del Evita Leonardo Grosso había sido desde el 2011 una fija en todos los cierres de la lista de diputados nacionales de la provincia, pero esta vez su nombre brilló por su ausencia.
¿La razón? Es precandidato a intendente de San Martín, donde tendrá competencia en las PASO.
Hasta ahí, todo normal, pero es llamativo que no le hayan reservado un espacio en la nómina a algún representante de la agrupación liderada por Emilio Pérsico en el lugar que habitualmente ocupaba Grosso.
Tampoco Somos Barrios de Pie tiene un lugar expectante en la lista. No solamente quedó excluido el líder de esa formación social, Daniel Menéndez, sino que haciendo un rastreo minucioso, recién aparece un nombre propio de esta organización en el borde inferior de la boleta, en el puesto 24, donde firmó la diputada nacional Natalia Souto.
Se trata naturalmente de una participación electoral testimonial, sin chances de renovar mandato. Quien sí aparece en un lugar un tanto más expectable es Juan Carlos Alderete, el líder de la díscola Corriente Clasista Combativa (CCC).
En principio, parece difícil que pueda ingresar el dirigente social al Congreso en una primera instancia. De todos modos, si Unión por la Patria ganara las elecciones presidenciales, es probable que algunos de los precandidatos de la lista que se ubican en posiciones superiores sean convocados para formar parte del Poder Ejecutivo, y ahí se le abriría una puerta a Alderete para jurar como reemplazante de uno de ellos.
Un nombre que tenía todos los números para meterse en la lista definitiva de precandidatos a diputados nacionales es el del ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis. Sin embargo, quedó afuera sorpresivamente. Tampoco hubo lugar para el ex ministro de Agricultura y Ganadería Julián Domínguez, ni para el ministro de Seguridad Aníbal Fernández.
COMENTARIOS