PARA EL MES PROXIMO

El campo anuncia paros y cacerolazos en el distrito

La propuesta surgió de la asamblea realizada ayer por Carbap en Tapalqué.

A mediados del próximo mes, los pueblos del interior de la Provincia volverán a mostrar el mismo escenario que tuvieron durante gran parte del año pasado: protestas, manifestaciones, cacerolazos frente a los edificios de las intendencias y volanteadas, aunque no cortes de rutas, ni parciales ni totales.
El motor será, otra vez, el conflicto que envuelve al campo con las autoridades nacionales, a partir del reclamo de parte de las entidades del agro de medidas que alivien la situación de los productores, aquejados por las pérdidas de rentabilidad.
Así fue decidido ayer en el marco de una asamblea que realizó en el distrito bonaerense de Tapalqué la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) para definir las acciones en el marco del plan de lucha que pretenden reflotar para reclamar medidas por parte del gobierno.
En ese encuentro -el primero de una serie de cuatro que continuará en Mar Chiquita, 9 de Julio y General Pico (La Pampa)- los máximos dirigentes de Carbap coincidieron en la necesidad de avanzar con medidas de fuerza que, aclararon, “en ningún caso incluirán cortes de ruta”.

Protestas

Del encuentro participaron los delegados de 32 municipios bonaerenses y pampeanos, que plasmaron un esbozo de las ideas para reavivar la protesta. El borrador, que seguirá siendo discutido en las próximas reuniones y que, finalmente, será elevado a la mesa de enlace bonaerense, incluye la posibilidad de realizar paros “graduales” de un día a la semana en distintos municipios.
Esas medidas de fuerza serán complementadas con “cacerolazos” en las puertas de los edificios municipales y con entrega de volantes en las rutas, confirmaron ayer dirigentes de la entidad.
“De todas formas, las medidas van a terminar de consensuarse a fines de enero en un encuentro que vamos a realizar en Coronel Suárez. Pero la idea es que a mediados de febrero empecemos con los paros localizados y cacerolazos”, explicó ayer Jorge Srodek, vicepresidente segundo de Carbap.
“La idea es que la protesta tenga el mayor carácter multisectorial posible, por eso convocamos el apoyo de los más de 8 millones de argentinos que viven en localidades de 50 mil habitantes o menos y cuyas economías sean de neto corte agropecuario, que son las que más están sufriendo esta crisis”, agregó Srodek.

Agenda agropecuaria

La revitalización de la protesta del agro en la Provincia se produce en el marco de lo que, según denuncian las entidades agropecuarias, es uno de los peores escenarios para el sector de los últimos años.
“La idea es volver a poner la agenda agropecuaria en el tapete porque la situación de muchas actividades es desesperante”, explicó Srodek.
El dirigente subrayó con especial énfasis los problemas de la ganadería, una actividad que, aseguró, “está siendo destruida”.
“Hoy -graficó-, el valor de la hacienda en pie es el mismo que hace cuatro años atrás. A este ritmo, para el año 2011 el país va a tener que importar carne”.
Además, mencionó la profunda caída de la producción de trigo, que dijo, “redundó en la peor cosecha de los últimos 40 años”. Si el año pasado se levantaron de los campos bonaerenses 16 millones de toneladas, para 2009 está previsto que no supere las nueve.
Por último, destacó la preocupante situación de unos 8 mil productores lecheros que, aseguró, “están en virtual jaque mate”.

Pasos

El encuentro de ayer, detallaron los dirigentes de Carbap, no es más que el primer paso de una serie que promete terminar con los productores nuevamente movilizados.
En ese marco, ratificaron la realización de nuevas asambleas en las próximas semanas y la posibilidad de lanzar una convocatoria para una nueva “asamblea federal”, que intente recuperar el espíritu de la que se desarrolló en Rosario el año pasado, cuando el conflicto entre el campo y el gobierno estaba en su punto más caliente.

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