OPINION

Tiempo de fortalecer UNEN

Según la mayoría de las encuestas publicadas, casi un 30 % de los electores tiene la voluntad de participar en las elecciones internas (PASO) de UNEN. Este porcentaje hace de UNEN una de las fuerzas potencialmente más competitivas de cara al 2015.
Por supuesto, que no ignoro el hecho de que no se puede descontar que quienes participan en la interna de UNEN, voten en la primera vuelta de la elección general a quien finalmente fue consagrado candidato en las PASO. Porque no ignoro que eso no necesariamente ocurrirá, es que afirmo que las fuerzas de UNEN, además de preocuparse por la suerte que cada una de ellas corra en la interna, deberían realizar una tarea orientada a fortalecer UNEN. En otras palabras, desarrollar una tarea orientada a lograr que cada ciudadano participante en su interna, posea con UNEN vínculos tan fuertes como los que posee con la fuerza o candidato al que piensa acompañar en las PASO.  Lamento decir que -a mi juicio- es muy poco lo que en este sentido hemos hecho. Es más, han ocurrido cosas que van en el sentido contrario. Me refiero a las discusiones mediáticas acerca de la ampliación de las fuerzas del Frente Amplio UNEN.
UNEN representa para muchos argentinos una fuerza cuya identidad supone la posibilidad de relevar al oficialismo desde concepciones progresistas y de aventar las chances de una restauración noventista. Ni más de lo mismo, ni volver atrás.
Esta es una de sus fortalezas. Ahora bien, las discusiones mediáticas acerca de la incorporación del PRO -y no sólo porque afectan su identidad y generan dudas acerca de lo que representa- no contribuyen al fortalecimiento de  UNEN. Al contrario.
Ha llegado la hora, pues, de un pronunciamiento claro y categórico, que ponga fin a este tipo de discusiones mediáticas, originadas en consideraciones individuales, que nunca fueron planteadas en el seno del frente y que no representa las posiciones mayoritarias de las fuerzas que lo componen, y que resultan funcionales a quienes quieren mas de los mismo o volver atrás.
Demarcar programáticamente el territorio de UNEN no debería resultar ofensivo para nadie. Sí debería ofender, en cambio, ocultar las diferencias que existen en la oposición. Y cuando hablo de diferencias programáticas o ideológicas, no apelo a esas categorías dicotómicas de los autoritarismos (y de muchos populismos) que dividen entre amigos - enemigos, patria - antipatria; pueblo - antipueblo. Me refiero al pluralismo democrático. Negar a éste, es también demagogia populista.
Claro que la República y sus valores son importantes y en esto podemos coincidir con muchas fuerzas. Pero gobernar es mucho más que ser honesto y respetuoso de las instituciones de la democracia (ojalá fueran estas las únicas diferencias entre los partidos o los gobiernos). Dije hace tiempo que era necesario firmar un compromiso de lealtad republicana y democrática entre todas las fuerzas políticas. Pero eso es distinto a la conformación de un frente electoral.
Lo dicho no supone negar las autonomías provinciales. Por varias razones, lo que no es “conveniente” a nivel nacional podría serlo a nivel provincial o municipal. Si El PRO o el Frente Renovador no tienen desarrollo a nivel nacional, y en muchas provincias y municipios no pueden competir con candidatos propios, y quieren acompañar a los del Frente Amplio UNEN, sería irracional oponerse a ello. Sin embargo, las estrategias provinciales  o municipales no pueden condicionar la nacional.
Hechas estas aclaraciones, vuelvo al principio: es impostergable trabajar para que en cada uno de los ciudadanos (empezando por la militancia y la dirigencia) se haga carne la idea de que UNEN es tan importante como las distintas fuerzas que la componen.  Sólo así lograremos retener y ampliar en la primera vuelta el porcentaje de participación de las PASO. Y si ello ocurre estaremos en la segunda vuelta.

(*) Diputado nacional y candidato a presidente del Comité de la Provincia de Buenos Aires de la UCR.

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