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Joaquín Boghossian, el delantero del Verde no tuvo un buen debut en la B Nacional. (Fotos: Diego Villar)
B NACIONAL

Derrota del Verde en Campana

Sarmiento perdió 2 a 0 frente a Villa Dálmine en el compromiso de la tercera fecha. El equipo de Fernando "Teté" Quiroz arrancó mejor el partido pero el local golpeó en los momentos justos y se quedó con una victoria que terminó siendo merecida.

Sarmiento perdió anoche por 2 a 0 frente a Villa Dálmine, el partido correspondiente a la tercera fecha de la B Nacional. El equipo de Fernando "Teté" Quiroz arrancó mejor pero el local desmoronó las ilusiones del Verde golpeando en los momentos justos. 
Ramiro López, a los 24m del primer tiempo, y Renso Pérez, a los 5m del complemento, anotaron los goles del equipo de Campana. Con la victoria, Dálmine alcanzó los seis puntos (debutó con triunfo sobre Boca Unidos y luego perdió con Quilmes) y se transformó, con un partido más, en uno de los líderes del Nacional, junto con Aldosivi (Mar del Plata) y Brown de Adrogué.
Por su parte, Sarmiento, descendido esta temporada y con un plantel que, en teoría, le debería permitir pelear por el regreso a la A, suma apenas la unidad del debut, empate sin goles con Quilmes (en la fecha anterior quedó libre).
En el trámite de las acciones se podría decir que el local pegó en los momentos justos y que con eso le alcanzó para quedarse con los tres puntos. No obstante, el que comenzó mejor el encuentro fue Sarmiento, que atacando por las bandas tuvo varias situaciones de gol.


En los primeros diez minutos del juego, entre Vidal y Boghossian se perdieron las opciones de gol que el Verde no iba a volver a tener en todo el partido. Ese arranque ilusionó a todos porque el conjunto de nuestra ciudad se mostró sólido en defensa y rápido para atacar.
No obstante, la previsibilidad en las acciones del equipo de Quiroz generaron el reacomodamiento en los dirigidos por Felipe De la Riva. Lentamente, el DT de Dálmine reubicó a algunos de sus jugadores para obstruir los ataques del Verde y esa idea funcionó. 
Ya con una clara paridad, a los 24 minutos llegó el primer grito sagrado de la noche. Pablo Burzio metió un lindo centro, Capelli falló en el despeje y Ramiro López, un ex Sarmiento, tuvo tiempo suficiente para parar el balón y elegir cómo vencer el arco de Vicentini. Demasiadas ventajas del fondo de Sarmiento que fueron aprovechadas por el local para poner el 1 a 0 parcial.
Con el resultado adverso nada cambió en la visita. De a atrás para adelante, Sarmiento se transformó en un equipo lento, sin la proyección de los marcadores de punta, sin la recuperación de los volantes y con una displicencia en algunos jugadores que generaron el fastidio del entrenador.
En cada pelota dividida, el Verde perdía y así Dálmine iba creciendo en su juego; hasta que el pitazo de Paletta mandó a los dos equipos al descanso. Eso fue un alivio para el conjunto de nuestra ciudad. 

Con varios cambios pero sin reacción
En los vestuarios, Quiroz intentó reavivar a sus futbolistas. Además de las indicaciones metió dos cambios para jugar la segunda parte: sacó al pibe Méndez y a Vidal, para que ingresar Vivani y Cacheiro.
En el inicio de esa segunda parte, Quiroz rearmó el equipo bajo el dibujo táctico del 3-4-1-2 pero nada cambió. Es cierto que la mala suerte también tuvo mucho que ver, porque a los 5 minutos, cuando el partido se estaba armando,  Villa Dálmine marcó el segundo. 
En una jugada que parecía intrascendente, Landa rechazó corto para que Enso Pérez detenga el balón con total tranquilidad y desde unos 30 metros saque un tremendo disparo que se clavó en el ángulo de Vicentini. Golazo del local y otro baldazo de agua fría para el conjunto de nuestra ciudad.
El segundo tanto del Viole fue un golpe de nocaut para los dirigidos por Quiroz. El Verde no tuvo reacción, no pudo levantarse nunca y comenzó a desordenarse aún más. En cambio, en Dálmine comenzó a crecer la figura del "Cuca" Nicolás Sánchez. El ex Sarmiento ordenó las acciones y fue marcando el ritmo de su equipo. 
Así, con Sánchez como estandarte, el local creció en el juego y superó ampliamente a un desdibujado Sarmiento. 
En definitiva, nada pudo evitar cambiar la historia. El Verde de Quiroz tuvo un partido flojo, que preocupa y que volvió a poner la continuidad del DT en el centro de la polémica. 
El resultado final no admite discusiones. Dálmine fue superior a su rival, pegó en los momentos justos y ya con la ventaja de dos goles tuvo múltiples chances de aumentar el marcador, aunque no pudo hacerlo por la ineficacia de sus delanteros y la resistencia del arquero Vicentini.
En la próxima jornada, la cuarta del máximo certamen de ascenso, Dálmine tendrá descanso y Sarmiento recibirá en Junín a Gimnasia y Esgrima de Jujuy.

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