Las audiencias obtenidas por el reciente superclásico que enfrentó a River y Boca fueron espectaculares. Lo mismo puede decirse de las cifras registradas en las casas apuestas deportivas, lo cual demuestra el enorme interés que despierta. Pero los futboleros argentinos también siguen con fervor otras competiciones que consideran muy atractivas. Un claro ejemplo es el de la Liga EA Sports, la cual se organiza en España.
Retomando lo referente a las audiencias, hay que decir que el anterior clásico que disputaron FC Barcelona y Real Madrid en la Ciudad Condal consiguió unas cifras realmente buenas. Sin embargo, han quedado opacadas por las obtenidas por el encuentro más reciente: el partido de vuelta que, en esta ocasión, se celebraba en el Santiago Bernabéu.
La expectación era máxima en Argentina, puesto que se decidía la liga española. Si el Barça cosechaba un triunfo, tenía opciones de quitarle el liderato al cuadro merengue un par de jornadas después si los hombres de Xavi Hernández sumaban seis puntos y los de Ancelotti perdían dos encuentros. Era difícil que pasase, pero podía ocurrir.
Por otra parte, si el Real Madrid empataba o ganaba, la liga la tenía en el bolsillo. El último resultado que hemos descrito es el que terminó produciéndose. Algunos argentinos realizaron esa predicción y no dudaron en apostar a favor de los madridistas, accediendo para tal fin a casas de apuestas como las analizadas en esta web: https://match.center/es/casas-de-apuestas-nuevas/
Así fue el duelo futbolístico que hizo vibrar de emoción a los argentinos
Ante el hecho de que la Liga se decidiese en un solo partido, era de esperar que los hinchas argentinos se congregasen en los bares y en sus propios domicilios para ver lo que prometía ser un espectáculo futbolístico en estado puro.
Desafortunadamente, los últimos clásicos no han sido demasiado emocionantes, pero no puede decirse lo mismo del Real Madrid-FC Barcelona que tuvo lugar el 21 de abril en el Santiago Bernabéu.
Lunin venía de haber hecho un auténtico partidazo en Manchester, convirtiéndose en el héroe de la tanda de penaltis, pero no estuvo nada acertado en este encuentro. En el minuto 6 calculó mal y no despejó un lanzamiento de esquina que Christensen anotó con mucha facilidad. Así pues, el Barça se situaba por delante en el marcador.
Pocos minutos después, concretamente en el 18, Lucas Vázquez -quien hizo un partidazo descomunal- provocó un penalti. La pena máxima fue ejecutada con eficacia por Vinícius, aunque Ter Stegen estuvo a punto de detenerlo. El arquero alemán acabó encajando un total de tres dianas.
Cuando quedaban poco más de 25 minutos para que terminase el encuentro, se desató la locura. En el 69, Fermín aprovechó un descuadre de la defensa merengue para anotar el 1-2. Fue en ese momento cuando el joven jugador del FC Barcelona cometió un error: celebrar de manera demasiado intensa, incluso subiéndose a la valla publicitaria.
Aquello con lo que no contaba Fermín era el espíritu del Real Madrid: nunca se rinde. Cuatro minutos después, Lucas Vázquez ponía las tablas en el marcador con un buen gol.
Los argentinos estaban quedando asombrados con el rendimiento del sustituto de Carvajal, pero su exhibición todavía no había terminado. Quedaba la guinda, la cual vino en el minuto 91 en forma de asistencia.
Un centro preciso fue rematado por Jude Bellingham, poniendo así el 3-2 en el marcador. El FC Barcelona apretó los últimos minutos, pero era demasiado tarde. No había nada que hacer: el Real Madrid se había hecho con los tres puntos, con todo lo que esto significaba.
Tras este resultado, el Real Madrid tiene la Liga EA Sports prácticamente ganada. De hecho, en su propio estadio pudo verse lo que parecía una celebración prematura. Y no es para menos, puesto que estar a tantos puntos de distancia del FC Barcelona da pie a que, muy probablemente, en las próximas jornadas el conjunto merengue pase a ser de forma matemática el campeón de la competición liguera.
Los hombres de Ancelotti afrontan su próximo compromiso europeo con el estado anímico al máximo nivel posible. Eso sí, no lo tendrán fácil para derrotar al Bayern, un encuentro que previsiblemente también será disfrutado por muchos argentinos.
En lo que respecta al Barça, está eliminado de la Champions League, por lo que solo le queda pelear por quedar segundo y evitar lo que sería una humillación histórica: quedar por debajo en la clasificación de otro equipo catalán, el Girona, el cual se ha asegurado participar en competición europea la próxima temporada.
Retomando lo referente al clásico, no sorprende que fuese tan visto por los argentinos. Y es que desde el minuto uno fue emocionante a más no poder, con 14 lanzamientos a puerta entre los dos equipos.
COMENTARIOS