Argentino se rehabilitó con una goleada

Si Argentino debía elegir un partido para ganar este fin de semana, si ndudas era este ante Gimnasia Indalo. Es que, al menos por ahora, se lo sacó de encima. Luego se verá.
Capelli planteó el partido de manera brillante. Dejó los dos extranjeros en el banco y luchó con los nacionales contra los tres foráneos visitantes desde el arranque. Eso sí, en el último cuarto Seawright y Robinson no podían despegar las piernas del piso de madera flotante. Lytch y Carlwell la seguían rompiendo.
Fue por eso la ventaja inicial de Gimnasia que con la combinación de Seawright y Jakson (hicieron 12 de los 19 goles entre ambos) ganó el cuarto ante la impaciencia de los hinchas Turcos.
Pero no tardó en llegar la mejoría argentinista. Ya en el segundo cuarto, literalmente, pasó por arriba a Gimnasia. Kavon Lytch (2 dobles 5 simples) fue determinante en la pintura y Brian Carlwell (1 triple, 3 dobles con una volcada incluída) hizo lo que quizo ante una defensa endeble que no supo cómo parar a los internos locales.
Hay que hacer un párrafo aparte para el "Pulga" Carabajal (1 triple, 1 doble, 1 simple) que entró a toda máquina distribuyendo el juego y dándole gol al equipo. Fue suficiente para ganar 27-12 (40-31 el primer tiempo).
El tercer cuarto fue determinante. Acá liquidó el partido Argentino. Sucedió que a las notables tareas de Kavon Lytch (3 dobles, 1 simple) y Brian Carlwell (1 triple, 1 doble) se le sumó Juan Cangelosi (3 triples, 1 simple) que en un ratito la metió de todos lados.
Y si le faltaba algo al espectáculo, en el cierre con escasos segundos por jugar Kavon Lytch le metió una asistencia a Nicolás de los Santos para que estallara el estadio al unísono de la chicharra: 69-48 y chau partido.
La impotencia de Diego Ciorciari (le dio un golpe a Carabajal, primero, y a Cangelosi, después) fue el termómetro de un Gimnasia que andaba, pero no caminaba.
En el último cuarto los comodorenses intentaron la heroica con los triples de Jackson y Byro (2 cada uno), pero estaban muy lejos.
Argentino mantuvo la calma y la pelota, Lytch-Carwell-Luchino y De los Santos hicieron el resto.