Esperar produce ansiedad. Unos, motivados por la curiosidad de ver a los reyes, otros por los nervios que produce sentirlos más cerca que nunca mientras entran en casa a dejar los regalos, y la mayoría por la euforia de estar a tan solo unas horas de poder disfrutar del juguete que llevan semanas, o incluso meses, esperando.
En el caso de los chicos, la experta en estudios de 'Calidad del Sueño' Ana García aconsejó en TN evitar una frase muy utilizada por los adultos, el “dormite pronto que los reyes te van a encontrar despierto".
Aunque puede interpretarse como algo tranquilizador, en realidad es totalmente contraproducente, según esta experta, ya que provoca aún más estrés del que la situación en sí genera. Y es que no hay nada más dañino para el sueño, que apurarse para dormir, expresó la experta a medios europeos.
- Madrugar (algo) es una muy buena idea. Aunque nos cueste, este día tenemos que levantarnos temprano. Así conseguiremos que a la hora de dormir, el cansancio de los chicos sea nuestro mejor aliado.
- La agenda, bien cargada de actividades: planear con anterioridad un día repleto puede ser buena idea. Un buen paseo en bici (cuanto antes y cuanto más largo mejor) es un plan perfecto. Lo que pretendemos es que los pequeños tengan la mente distraída, y a ser posible, alejada de estímulos festivos.
- Evitar la siesta en lo posible: si todo el año es condición obligada, en este caso precisamente no es una opción recomendada.
- A la hora de acostarse, acompañar al nene o nena a la cama y contarle un cuento breve o, según la edad, hablar con el chico de algo que le resulte agradable y le permita conciliar el sueño. Y apagar la luz y mantenerse a su lado mientras que consideremos oportuno, dado que en algunos casos, la imagen imponente de los reyes podría provocar en algunos la sensación de miedo.
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