Desplante del campo a Ariel Franetovich

En medio de la renovada tensión entre el Gobierno bonaerense y el campo, entidades del sector resolvieron no concurrir a una reunión a las que fueron convocadas por el nuevo ministro de Asuntos Agrarios, Ariel Franetovich.
Fue una respuesta en sintonía con el nuevo pico de conflicto desatado, ahora, por el avance de la nueva ley Impositiva que establece mayores cargas tributarias para los ruralistas.
Franetovich, en un intento por reencauzar los contactos con la Mesa Agropecua-ria Provincial quebrados tras la intempestiva salida del ministerio de Emilio Monzó, convocó a las entidades para esta semana. Y eligió hacer reuniones individuales en procura, se dijo oficialmente, de estrechar vínculos y avanzar en diversos temas.
Pero cuando el miércoles le tocó el turno a Carbap, su titular, Pedro Apaolaza, desistió de acudir a la cita con el argumento de que resultaba más conveniente un encuentro conjunto con el resto de las entidades, de acuerdo con lo que trascendió ayer.
La decisión generó todo tipo de especulaciones. Hay quienes interpretan que la respuesta del agro apuntó a abroquelarse y evitar que una negociación individual pudiera debilitar al sector. Desde Agrarios, en cambio, se justifica el convite por separado. “Queríamos avanzar con mesas de trabajo sin tanta exposición mediática”, dicen.
Pero en estas idas y venidas existen otros condimentos. Para el campo, el desplante a Franetovich -un ministro al que los ruralistas le desconfían por su apoyo a las políticas del Gobierno nacional y su alineamiento con Florencio Randazzo-, es una respuesta a una decisión política del gobernador Daniel Scioli que pone un nuevo obstáculo en la reconstrucción de la relación: el aumento al impuesto Inmobiliario Rural que empezará a regir en 2010.

Proyecto y marcha

No es el único aspecto de la ley Impositiva que enerva al campo. La nueva imposición a importaciones y exportaciones en los puertos de la Provincia, terminará impactando sobre los productores, que en las últimas horas salieron con los tapones de punta contra el proyecto oficial que ya tiene sanción en la Cámara de Diputados.
Pero el nuevo pico de tensión entre el campo y Scioli estaría empujando la idea que vienen enarbolando algunas entidades de la Mesa de Enlace, como la Federación Agraria: una marcha a Casa de Gobierno para hacer blanco en el Gobernador. De hecho ayer, el titular de la Federación, Eduardo Buzzi, volvió a alentar esa posibilidad e incluso fue un poco más allá: le pidió acompañamiento a Carbap para la concreción de la protesta.
En el Ejecutivo piensan volver a llamar a las entidades. “Si quieren una reunión conjunta se hará. Vamos a volver a convocarlas”, dijeron ayer cerca de Frane-tovich. Pero también se reiteró la advertencia ya lanzada por el ministro apenas asumió: “Si las entidades no quieren dialogar, lo haremos directamente con los productores de los distritos”.