En Villa del Parque consideran prioritario la llegada de la red cloacal en ese sector

A medida que Junín fue creciendo y extendiendo, las líneas divisorias se hicieron cada vez más difusas. De esta manera, la Avenida de Circunvalación, que anteriormente funcionaba como límite de la ciudad, en la actualidad -en los hechos- ya no lo es, puesto que “del otro lado” de esa arteria, en el barrio Villa del Parque, lo que otrora fuera una zona de quintas y pequeñas chacras, hoy es un área semiurbanizada, que cada vez aumenta más y más su población.
En ese marco, a pesar de que constantemente se suman nuevas familias que se mudan a ese sector, todavía se advierten muchos contrastes: las casas humildes, se entremezclan con las nuevas y más modernas construcciones, y las casas de fin de semana se confunden con pequeñas huertas y hasta algunos sembradíos.
Entonces, la llegada de más y más habitantes, hizo que se acrecentaran las necesidades de infraestructura, y si bien desde la sociedad de fomento se muestran satisfechos por haber logrado algún progreso, también reclaman la llegada de más prestaciones, principalmente, las cloacas.
Aunque también solicitan el gas natural y el arreglo de calles y baldíos.

El barrio

Delimitado por la Avenida de Circunvalación, la Ruta Nacional N° 7 y las calles Los Naranjos y Garibaldi, Villa del Parque es un extenso barrio ubicado al sudeste de la ciudad, que exhibe un notable crecimiento. “Hay mucha gente nueva, inclusive en el último año varias familias se han venido a vivir para acá”, cuenta Gladys Alonso, la presidenta de la sociedad de fomento.
Dentro de su geografía, algunas de las instituciones que allí se encuentran son: la Capilla del Espíritu Santo, que ofrece misas periódicamente, la sede de la sociedad de fomento, en donde se está terminando de construir una Casita del Saber, un jardín maternal, la unidad sanitaria y la Residencia Terapéutica conocida como Clínica villa del Parque.
En tanto, no hay escuelas en el barrio, por lo que los chicos del lugar concurren a la N° 35, que está en Cerrito Colorado, cruzando la Ruta 7, o a las más céntricas, traspasando la Circunvalación.

Agua y cloacas

A pesar de que se encuentra ubicado a unas 15 cuadras del centro neurálgico de la ciudad, el barrio carece de algunos servicios esenciales: si bien el agua corriente está presente en un importante sector de Villa del Parque, nadie tiene cloacas ni gas natural.
“Lo más necesario para nosotros es que lleguen las cloacas”, dice Alonso.
Esta semana, el secretario de Obras Públicas del Municipio, Agustín Pinedo, habló sobre las dificultades para extender este servicio hasta allá: “Hay algunos que no vamos a poder llegar, como por ejemplo las cloacas en Villa del Parque porque está a muchísima distancia y además hay un hecho natural insalvable, que es un río que separa ese barrio de la planta de bombeo de líquidos cloacales. No es el caso del agua porque vamos a seguir ampliando el servicio porque el agua baja y sube, en cambio las cloacas necesitan una pendiente en caída, por lo tanto es imposible”.
Sin embargó, la titular de la Sociedad de Fomento no pierde la fe. “En la última reunión que tuvimos con el intendente -cuenta-, hace tres meses aproximadamente, nos dio una esperanza: nos dijo que había alguna posibilidad pero tenían que estudiar cómo podían hacerlo, porque nosotros tenemos la dificultad que la red debe cruzar el canal y eso hace que la obra sea más cara”.

Otros servicios

En cuanto al gas natural, nadie cuenta con este beneficio. Ahora que la tercera planta de rebaje está prácticamente terminada, son optimistas respecto de la celeridad con que llegue la red hasta aquí: “Suponemos que cuando empiecen con los trabajos, vendrán para este lado porque la planta está acá cerca”.
Además, todas las calles son de tierra, exceptuando unos 500 metros de la entrada al barrio por Álvarez Rodríguez donde hay pavimento.
Según cuenta la presidenta de la sociedad de fomento, en la última campaña electoral las autoridades prometieron obras que incluyen 9 cuadras de cordón cuneta y base estabilizada, aunque esa obra todavía no se hizo.
En cuanto al mantenimiento de las mismas, la dirigente barrial sostiene que “en general, se mantienen”, pero a veces, “cuando pasa un tiempo que no vienen y llueve, se hacen pozos”, algo que se advierte en la actualidad en algunos sectores.
Además, el alumbrado público está en la mayor parte del barrio, pero en los lugares donde falta, es muy costoso, porque son zonas en donde ni siquiera está el cableado. Faltarían luminarias sobre la calle Lartigau y en todo el sector este-sudeste del barrio.

Más temas

A pesar de las restricciones en los servicios, los vecinos coinciden en destacar que el barrio ha progresado en el último tiempo.
Sobre todo porque, a partir de las obras en el Río Salado, se terminaron los problemas de inundaciones, lo que atrajo la construcción.
Una cuestión que preocupa a los vecinos es el tránsito. Según cuenta Alonso, “es muy complicado”, y por esa razón pidieron reductores de velocidad en la calle Álvarez Rodríguez. “Los badenes ya están aprobados, pero todavía no los hicieron, y es algo muy necesario porque hay muchos autos que toman esa calle como si fuera una autopista”, señala la dirigente barrial, y luego agrega: “Los caballos también son un problema porque están todo el tiempo sueltos y eso genera mucho peligro con los autos”.
En tanto, la esquina de Álvarez Rodríguez y Aconcagua, y la calle Lartigau también tienen sus complicaciones, aunque el riesgo es menor.
En referencia a la seguridad, los lugareños aseguran que el barrio “está tranquilo” y que “suceden casos, como en todos lados”. En los últimos días se produjeron dos hechos en casas de la zona de Álvarez Rodríguez y Aconcagua. “Ahora no se ven muchos patrulleros, pasan con mucha menos frecuencia que antes”, se lamenta la presidenta de la entidad barrial.
Por último, el tema de los lotes a los que les falta mantenimiento es un problema por dos aspectos: en cuanto a salubridad y por los riesgos para la seguridad. De hecho, el secretario de Seguridad, Víctor Knappe, les pidió a las autoridades de la sociedad de fomento que le indicaran cuáles son los terrenos que presentan este problema para estar alertas. “Nosotros le hicimos el mapa, pero todavía no se hizo nada”, concluye Alonso.