11 de Julio: piden medidas para paliar la inseguridad y organizar el tránsito

El barrio 11 de Julio empezó su vida institucional hace cuatro décadas y en todo este tiempo se logró -gracias al esfuerzo de sus vecinos y fomentistas- dotar al sector de una buena cantidad de servicios de infraestructura, quedando pendientes en la actualidad algunas obras puntuales, referentes al alumbrado público, el pavimento y el gas natural.
Es por ello que los principales reclamos de los vecinos del lugar no tienen que ver con lo estructural, sino con acciones tendientes a mejorar la vida diaria de sus residentes.
En ese marco, los inconvenientes con la inseguridad y el tránsito ocupan los primeros lugares en el ranking de preocupación de los lugareños.

El barrio

Delimitado por las calles Gandini, Primera Junta y su continuación, Aristóbulo Del Valle; Avenida de Circunvalación, y San José Obrero y su continuación, Avenida República, el barrio 11 de Julio fue, históricamente, una zona de quintas.
“Cuando arrancamos, el 11 de julio de 1971, ésta era una zona de quintas, no había ningún servicio”, recuerda Juan Carlos Bermúdez, actual presidente de la sociedad de fomento.
“En la historia de este barrio -agrega- pasó mucha gente por diferentes comisiones y todos trabajaron mucho por el progreso del sector”.
Lo primero que se hizo fue la gestión para abrir las calles y ponerle el nombre a cada una de ellas, algo que llevó algún tiempo.
Después se llevó la electricidad, que empezó siendo una extensión precaria, pero con un mejoramiento constante, hasta transformarse en lo que es hoy: una red con cable pre ensamblado en un 65% del barrio y el resto con una línea común.
Más tarde llegó el teléfono, el agua corriente y las cloacas, como explica Bermúdez: “Fuimos armando por consorcios la extensión de la red de agua y fue en ese momento cuando la Provincia hizo una obra de cloacas que llegaba hasta el barrio Prado Español, entonces nosotros hicimos los trámites correspondientes para que se amplíe hasta acá y nos encontramos con la buena sorpresa de que el barrio fue incluido en esa extensión y gracias a eso, todo este sector tiene cloacas y eso fue sin costo para los vecinos. Sólo había quedado una parte entre Borchex y Circunvalación, pero se hizo por consorcio, en una obra a siete metros de profundidad, en un terreno muy peligroso porque se trata de una zona de médanos”.
En cuanto al gas natural, el 80% de los residentes tienen esta prestación. Para cubrir lo que falta, es necesario que se haga la tercera planta de rebaje.
Bermúdez se lamenta porque “la obra de gas se hizo, pero lamentablemente la hipocresía de la gente nos duele, ya que ha quedado algún sector sin cubrir porque la especulación de algunos propietarios de baldíos, hace que no hayan aportado para este servicio”.
Un 40% de las calles del barrio están asfaltadas, aunque los fomentistas recuerdan que en la última campaña electoral se les prometió para este período otras 17 cuadras de pavimento, 17 de cordón cuneta y 26 de base estabilizada.
Por último, todo este sector cuenta con el servicio de alumbrado público y en el último año, la empresa EDEN cambió 60 postes que no estaban en buen estado.
“De acuerdo a la normativa vigente -agrega Bermúdez-, en las calles que tienen el hormigón, el alumbrado público debería estar sostenido por columnas, pero no podemos comprarlas por el mismo tema: por los dueños de los terrenos baldíos que no se suman. Hay un convenio con la Municipalidad mediante el cual los vecinos ponemos las columnas y la Comuna la luminaria y la instalación. Actualmente, en dos cuadras de la calle 17 de Agosto y otras tres de Chacabuco, no se está cumpliendo por el problema de los lotes”.

Baldíos

Precisamente, la gran cantidad de terrenos baldíos sin mantenimiento constituyen un severo problema para los residentes del lugar, como cuenta el presidente de la sociedad de fomento: “Nosotros tuvimos una reunión con un concejal de la que surgió la idea de que para todos estos propietarios de terrenos que están especulando, se dicte una ordenanza que fije una tasa progresiva a aquello que esté en desuso y que no tenga ninguna mejora, con lo que se lograría seguir haciendo las obras necesarias y el mejoramiento del lugar de tránsito”.
Es que en este barrio hay muchos lotes descuidados, en los que se han visto roedores y animales de todo tipo.

Inseguridad

Pero la existencia de estos terrenos con altos pastizales también generan inconvenientes en cuanto a la inseguridad, como dice Bermúdez: “Se producen ‘reuniones’ a ciertas horas, que no tendrían por qué darse, con gente de distintos lugares pero, fundamentalmente, de este barrio. Lamento tener que reconocer que aquellos que empezaron conmigo a trabajar por el barrio hace más de 40 años, hoy sus nietos han equivocado el camino, porque no trabajan, no estudian y tienen becas de las que no rinden cuentas”.
De esta manera, el dirigente fomentista remarca que la inseguridad “es un tema muy preocupante”, y puntualiza: “Los que se perjudican son los chicos: acá hay muchachos que no respetan nada, se meten en cualquier lado, y todo es muy difícil. Nosotros notificamos las cosas que nos pasan y a partir de ahí, la decisión es de la Policía”.

Tránsito

El otro punto sobre el que machacan las autoridades vecinales es el del tránsito, al que no dudan en calificar como “caótico”.
Bermúdez señala que hay “un grave problema con la circulación de camiones que rompen el hormigón y a pesar de todas nuestras quejas, siguen pasando por acá”.
Desde la Avenida de Circunvalación hay dos entradas de camiones: por San José Obrero y por Aristóbulo del Valle, “pero les es más cómodo ir por el pavimento y por eso toman 12 de Octubre, rompiendo todo el hormigón”, comenta Bermúdez.
Otro punto es el de la velocidad, tanto de autos como de motos, sobre todo en las calles asfaltadas. De hecho, se han producido algunos accidentes por este motivo.

Instituciones

En el barrio 11 de Julio no hay unidades sanitarias, aunque están cubiertos por las de los vecindarios vecinos Prado Español y Emilio Mitre.
Tampoco hay escuelas dentro de su geografía: las más próximas son la N° 29, la N° 22 y la N° 12.
Además, funciona el Centro de Formación Profesional 401 y el Jardín Maternal Monigote.
Durante muchos años funcionó un centro de veteranos de guerra, pero hoy está disuelto y la plaza Héroes caídos en Malvinas, que los homenajeaba, hoy se encuentra muy descuidada: “No tenemos ni siquiera el cartel pintado en la plaza. En su momento trabajamos mucho por ese espacio con el Centro Argentino de Servicio, una entidad de bien público que ya no existe más, y actualmente en ese lugar no están ni las placas, porque sabemos que siguen existiendo los rateros que hacen demasiado daño y se llevan todo lo que sea bronce”.
En cuanto a la sociedad de fomento, Bermúdez explica que, por el momento, “los talleres quedaron al margen por falta de lugar”, ya que se están dedicando por completo a la construcción de un lugar para la Biblioteca Popular 2 de Abril, una obra que está avanzada y mejora la calidad edilicia del lugar.