En el marco del operativo denominado “Aliados por la infancia", que se concretó en ocho países de América, se efectuaron 150 allanamientos, 61 de ellos en la Argentina y de ellos, catorce en ciudades de la Provincia de Buenos Aires.
Las pesquisas fueron concretadas por personal de la Dirección de Investigaciones Cibercrimen a cargo del comisario mayor Norberto Gabott; de la Division Interior Norte, a cargo del comisario Juan José Funes, y de la Sección de Investigaciones Cibercrimen a cargo del oficial subinspector, el juninense Mauro Canavesio.
En la ciudad de Sarandí, se secuestraron una notebook y un teléfono celular y se le inició al dueño de casa, tras el allanamiento, de su imputación por el delito de “Infracción artículo 128, 2º párrafo del Código Procesal Penal”.
En Wilde, se confiscaron dos notebooks, una tablet, nueve teléfonos celulares, dos dispositivos electrónicos y cinco dispositivos de almacenamiento, quedando el dueño de casa imputado por el mismo hecho delictivo que el anterior caso. En Bahía Blanca se procedió al secuestro de dos PCs, dos tablets, once dispositivos de almacenamiento; en Punta Alta, localidad cercana a la anterior, se secuestraron una notebook y un teléfono celular, en tanto que el imputado no se hallaba en el lugar.
En San Justo se secuestró una PC, dos celulares, dos dispositivos de almacenamiento y en González Catán se confiscaron tres teléfonos celulares, dos dispositivos electrónicos y nueve dispositivos de almacenamiento, quedando los dueños de casa imputados por el delito de “infracción al artículo 128, 2º párrafo del Código Procesal Penal”.
En otra ciudad del Conurbano, Gregorio de Laferrere, se secuestró una notebook, dos celulares y un dispositivo de almacenamiento. Uno de ellos, mediante el programa p2p “Emule”, estaba descargando diversos archivos, los que analizados en el momento eran compatibles con "abuso sexual infantil". También se le aplicó al dueño de casa de la misma imputación que los anteriores, mientras que en Alejandro Korn se secuestró una PC, una tablet, un teléfono celular, siete dispositivos de almacenamiento y al propietario de la finca no se la realizó ningún tipo de imputación.
En el objetivo de Villa Elisa se secuestró una notebook, tres teléfonos celulares, tres dispositivos de almacenamiento, mientras que en una casa de Almirante Brown se secuestraron nueve celulares y un dispositivo electrónico.
En otra finca de esa ciudad del Gran Buenos Aires, se confiscaron tres teléfonos celulares y diez dispositivos de almacenamiento, quedando imputados un hombre y una mujer por el delito de “Infracción al artículo 128, 2º párrafo del C. P.”.
Siguiendo con los allanamientos, en una vivienda de Ituzaingó se procedió al secuestro de una notebook, dos celulares, dos dispositivos de almacenamiento, mientras que en otra casa del mismo Distrito se secuestró una notebook, una tablet, tres celulares, dos dispositivos electronicos y once dispositivos de almacenamiento. Ambos dueños de casa quedaron a disposición de la Justicia, con la misma imputación que los anteriores infractores a la ley.
Armas de fuego
Finalmente, la mayor cantidad de obtejos secuestrados se dio en una casa de la ciudad bonaerense de San Miguel, también del Conurbano.
Se secuestraron un celular y seis armas de fuego, una Browning de 9 milímetros, con municiones y cargador; una Bersa modelo 383, con cargador y sin municiones; un revólver calibre '38 sin municiones; un pistolón sin marca ni numeración visible; un cajón de mecanismo de disparo Mauser; y un fusil Mauser.
Ninguna de las armas citadas poseía pedido de secuestro y se le inició al propietario de las mismas una causa penal por el delito de "Tenencia Ilegal de armas de guerra".
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