Las transferencias de recursos económicos de la provincia de Buenos Aires hacia los municipios deberían ser automáticas por ley e informadas on line.
Pero nos encontramos con la sorpresa que desde el 10 de octubre de 2013, no recibimos más información.
Tal es así que no podemos saber cuál es la deuda actual, que según proyecciones, sólo en concepto de juegos de azar estaría llegando al millón y medio de pesos.
Es algo que no entendemos, no sólo porque de esta forma la Provincia estaría violando la ley sino que es imposible que no esté recaudando por tal concepto, ya que el fondo se nutre diariamente del juego, de las agencias de quiniela, del bingo, del casino, del hipódromo.
Nuestra pregunta es ¿cómo, si las agencias de juego están obligadas a depositar diariamente lo recaudado a la Provincia, ésta se atrasa ocho meses en transferir a los municipios los recursos que por ley le corresponden?¿Qué se hizo en ese tiempo con esos fondos?
Si miramos el proceder del gobernador bonaerense, Daniel Scioli, quizá encontremos la respuesta.
Grandes son los anuncios en obras públicas provinciales y así están las rutas, caminos, hospitales y escuelas.
Gran difusión tuvo la emergencia en seguridad, que al día de hoy vemos que parece haberse decretado a los efectos de discrecionalidad en las compras y marketing político, ya que cada vez es mayor la transferencia de problemas de competencia provincial al ámbito municipal, sin los recursos humanos y económicos para enfrentarlos.
En definitiva, vemos al gobierno provincial deslindando responsabilidades y deber de acción en áreas fundamentales.
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