El Molino: piden respuestas a reclamos que se reiteran desde hace mucho tiempo

El Molino, uno de los barrios tradicionales de la ciudad, renombrado por haber albergado entre sus calles a artistas del calibre de Delio Destéfani y Luis B. Negreti, está delimitado por las vías del Ferrocarril General San Martín, Rivadavia, Lilliedal, Ameghino, Bolívar y Chile.
En sus 37 hectáreas, viven unas dos mil personas y en todas sus viviendas cuentan con los servicios básicos: agua corriente, cloacas y gas natural. Allí, además de la Escuela Nº 19 y del Jardín de Infantes, cuenta con cinco espacios verdes: las plazas Alem, Destéfani, Negreti, Presidentes Constitucionales y la plazoleta Ayala.
Un recorrido por las calles de este vecindario muestra, claramente, cuál es uno de sus problemas históricos: el estado del asfalto. Aunque en las últimas semanas se comenzó con un plan de repavimentación.
Pero ese no es el único reclamo: los representantes de la sociedad de fomento advierten dificultades con la inseguridad, el tránsito, el servicio de energía eléctrica, y el mantenimiento de terrenos linderos con el ferrocarril.

Pavimento

Desde hace mucho tiempo, las calles del barrio El Molino son un fiel reflejo del deterioro que sufre el asfalto de la ciudad. Arterias como Uruguay, Edison y Negreti resultan verdaderas pistas con obstáculos para conductores y motociclistas.
Eso generó numerosos reclamos. “El problema más grande del barrio es el asfalto”, dicen desde la sociedad de fomento, y agregan: “Actualmente se están haciendo algunas obras y esperamos que ayuden a mejorar un poco en este aspecto. Hace años que venimos reclamando por el tema del asfalto y ahora se empezó a trabajar, aunque nosotros pensábamos que se iba a levantar todo y se haría de nuevo, eso pero sólo se hace en algunas cuadras, el resto se tapa nomás”.
La secretaria de la entidad barrial informa que “los expedientes con los reclamos tienen, como mínimo, tres años. Lo que se está haciendo ahora no es una repavimentación como hubiésemos querido, en algunas cuadras solamente va a ser una capa sobre lo que ya estaba. Vamos a ver”.
“Nadie nos informó cómo va a ser el plan de repavimentación, sólo sabemos lo que salió en las publicidades del gobierno local”, puntualiza la presidenta, Gladys Falabella.

Seguridad y tránsito

Falabella cuenta que la situación en cuanto a la seguridad es preocupante. “Estamos en una época en la que hay bastantes arrebatos”, dice, aunque aclara que “no se ven robos a domicilios”.
En cuanto al tránsito, solicitan semáforos en Javier Muñiz, en las intersecciones con Ameghino y Almirante Brown, porque el paso de los vehículos hace a esa arteria muy peligrosa: “La gente anda muy rápido, no para nadie, y está la salida del jardín de infantes muy cerca. Hay que tener en cuenta que esa calle es una de las salidas de la ciudad”.
Además, insisten en el pedido de señalización en el cruce de Almirante Brown y las vías del ferrocarril, algo que le correspondería a la empresa concesionaria del servicio.

Limpieza y desmalezamiento

Justamente, en la zona lindera a las vías del ferrocarril, hay grandes inconvenientes por la falta de mantenimiento que genera dificultades, principalmente en los días de lluvia, aunque no solo por el agua que cae.
María, que reside en la intersección de Paraguay y las vías, explica: “Hace 21 años que vivo ahí y siempre me dediqué a limpiar el terreno de la vía y desmalezar. Nadie me ayuda, lo tengo que hacer yo y es algo que no me corresponde. Ese lugar es el desagote de la zona y recibo toda la mugre. Y además tengo miedo, porque he visto gente que a la noche esconde cosas, por eso trato de mantenerlo limpio”.
Al lado de su casa “hay un zanjón que debería dragarse, al menos, una vez por año”, dice, pero remarca que “no se hace nada”, a pesar de que se hicieron numerosos reclamos, no solo de ella como particular damnificada, sino que la sociedad de fomento también realizó presentaciones ante las autoridades, sin haber obtenido respuestas.

Más reclamos

En relación a esto, los fomentistas sostienen que hay fallas en la recolección de residuos, no en la que se hace diariamente, sino “en lo que tiene que ver con escombros y montículos grandes”, que se realiza los viernes y que, según manifiestan, “hay semanas que pasan de largo”.
En tanto, otro punto sobre el que peticionarán ante quien corresponda, tiene que ver con la prestación del servicio eléctrico domiciliario: “Estamos sufriendo cortes muy seguidos y desde la empresa nos informan que el problema siempre es el generador número uno. En una oportunidad, un empleado nos dijo que tendríamos que hacer un reclamo conjunto porque ese generador ya no admite más reparaciones, por lo que habría que cambiarlo, así que seguramente haremos una nota desde la sociedad de fomento”.

Sociedad de fomento

La entidad fomentista, cuya comisión directiva renovó su mandato recientemente, cuenta con el apoyo de los socios y brinda servicios a los vecinos, como los cursos de Tejido, Pintura Decorativa e Idioma Italiano.
Además, la semana próxima comenzarán a dictar clases de apoyo escolar. Es por eso que anunciaron que será los miércoles, para todos los chicos que lo necesiten.
Finalmente, los dirigentes barriales anticipan que, además de la colaboración que prestan a las instituciones educativas del vecindario, este año van a trabajar para hacer la fiesta de la sociedad de fomento, porque en 2011 cumplieron 25 años de la refundación, y aún no pudieron hacer el festejo, por lo que esperan poder concretarlo en este año.