None
EL TONO MODERADO Y PACIFICADOR DEL PRESIDENTE ROHANI HACE ENFURECER A NETANYAHU

La nueva posición iraní descoloca a la diplomacia de Israel en la ONU

El primer ministro hebreo calificó de "cínico" y "lleno de hipocresía" el discurso del nuevo presidente de Irán, en la Asamblea General de la ONU. Israel muestra preocupación por el efecto conciliador que causa en Occidente.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, tachó ayer de "cínico" el discurso pronunciado por el nuevo presidente iraní, Hasan Rohani, anteayer en la ONU, pese a que evitó casi por completo la retórica antiisraelí y a que luego incluso condenó el Holocausto.
"Como esperaba, fue un discurso cínico y lleno de hipocresía. Rohani habló de derechos humanos incluso mientras fuerzas iraníes están participando en la matanza a gran escala de civiles inocentes en Siria", manifestó Netanyahu, según un comunicado de su oficina.
En una esperada intervención ante la Asamblea General de la ONU –su debut en la escena internacional–, Rohani, asumido el mes pasado y considerado un moderado, plasmó recientes gestos de acercamiento a Occidente al ofrecer a Estados Unidos y sus aliados negociaciones por el polémico programa nuclear iraní.
Además, prácticamente evitó cualquier crítica expresa contra Israel, al que apenas dedicó un velado cuestionamiento, sin nombrarlo, por la ocupación de Palestina, diferenciándose de modo drástico de su predecesor, Mahmud Ahmadinejad, que llamaba abiertamente a la destrucción de Israel.
Rohani dio incluso un paso más y, en una entrevista con la cadena CNN difundida anteanoche, dijo que el "crimen cometido por los nazis contra los judíos es reprobable y condenable".
Ahmadinejad, en cambio, una vez dijo que el Holocausto era un "mito" y más tarde matizó que se necesitaba mayor investigación para determinar si realmente ocurrió.
Incluso antes de que hablara Rohani, Netanyahu advirtió desde Israel que el mundo no debe "engañarse" con los gestos de Rohani y debe mantener la presión sobre Irán por su programa nuclear, en palabras destinadas a hacer de contrapeso al creciente entusiasmo en Occidente por las señales del nuevo líder iraní.
El premier israelí volvió ayer a la carga y, además de calificar de cínico a Rohani, reiteró acusaciones de que Irán emplea "el terrorismo en decenas de países en todo el mundo" y quiere fabricar bombas atómicas, pese a que Teherán insiste en que su programa nuclear tiene fines exclusivamente civiles.
Rohani afirmó en la ONU que las armas de destrucción masiva "no tienen lugar en la doctrina de seguridad y defensa" de su país y ofreció un "diálogo constructivo" con Estados Unidos.
Por instrucción de Netanyahu, que hablará ante la Asamblea de la ONU el martes próximo, la delegación israelí en Naciones Unidas abandonó anteayer el recinto cuando Rohani inició su discurso.
Ayer, el ministro de Finanzas de Francia, Yair Lapid, dijo en un mensaje de texto enviado a periodistas que la orden de Netanyahu fue un "error" porque dio la impresión de que Israel no está interesado en alentar una solución pacífica al diferendo por el programa nuclear iraní, informó la cadena de noticias BBC.
También ayer, en otra señal del escepticismo de Israel, el ministro de Defensa Civil israelí, Guilad Erdan, se mostró "más que preocupado" por el efecto en el mundo del tono conciliatorio expresado por Rohani al condenar el Holocausto y en relación con el programa nuclear de su país.
"Estoy más que preocupado, estoy muy inquieto (...) El lenguaje de Rohani está teniendo su efecto", dijo Erdan, según el diario digital The Times of Israel.
El ministro restó importancia a la condena del Holocausto de Rohani ante la CNN.
Por su parte, el ministro de Inteligencia israelí, Yuval Steinitz, remarcó que Rohani "no negó el Holocausto", pero tampoco "condenó a quienes lo negaron", en referencia a Ahmadinejad.
El viceministro de Relaciones Exteriores, Zeev Elkin declaró en la radio militar: "¿Adónde llegamos? Basta con reconocer que la Shoah ocurrió para aparecer como un hombre sabio". 

COMENTARIOS