En el Día del Trabajador, 1 de Mayo, tuvo lugar el acto oficial del Distrito de Leandro N. Alem en la Rotonda del Labriego, organizado por el Municipio con la participación de instituciones educativas.
En su alocución, Lucila García recordó que su conmemoración tenía un significado especial, porque recordaba una jornada de lucha histórica de los trabajadores en pos de lograr condiciones de vida y de trabajo dignas.
“Otro 1° de Mayo, pero de 1853, el Congreso General Constituyente reunido en Santa Fe sancionó nuestra Constitución Nacional, ley Suprema e instrumento propicio para consagrar obligaciones, derechos y garantías a todos los habitantes del suelo argentino”, acotó.
Las banderas de las instituciones educativas y de bien público estuvieron en el acto, como lo hacen habitualmente, dando con su presencia una significación de compromiso con la Patria. En la oportunidad se escuchó la canción Aurora, en homenaje a la bandera argentina, y el Himno Nacional Argentino, entonado por todos los presentes.
Una alumna del Fines, Zulma Hernández, hizo un repaso histórico sobre la significación de la fecha y la larga y denodada lucha de los trabajadores por obtener derechos y garantías. Resaltó especialmente a los llamados “Mártires de Chicago” –obreros ejecutados a fines del siglo 19 por participar de una larga huelga a fin de conseguir una reducción horaria en su jornada-.
Por su parte, el intendente Ferraris agradeció cálidamente ese “viaje en el tiempo” que acababa de hacer la alumna, recordando a todos “los que nos fueron dando los cimientos para esta realidad de hoy, con derechos ganados como las jornadas de ocho horas, el descanso dominical y el sábado inglés, las vacaciones pagas, el aguinaldo y muchos otros más”.
Destacó la esforzada labor de quienes se ocuparon de forjar el futuro de dicho Distrito, “trabajadores rurales que, de sol a sol, en pueblos sin ningún servicio, en condiciones muy rudimentarias, hicieron su hogar aquí y lucharon por salir adelante. Lo mismo los primeros docentes, que enfrentaron un gran desafío en épocas donde sólo trasladarse de un lugar a otro era una verdadera odisea. También los comerciantes, que repartían la mercadería en carro casa por casa, para luego establecerse con aquellos almacenes que todos recordamos”
“Hoy en día – continuó diciendo Ferraris- reconocemos la tarea de los trabajadores de la salud que sobrellevan el sistema, y que tanto significaron en época de pandemia. También a los compañeros del Corralón, que tanto trabajaron hace justo un año enfrentando las consecuencias del tornado que azotó a Vedia”.
“Están los que piensan que el salario y demás derechos son un gasto para el Estado, o que hay que extender la edad de jubilación – apuntó- nosotros, en cambio, honramos diariamente a los trabajadores y estamos siempre aportando a su bienestar.
Los chicos de 2° grado de la Escuela Primaria N° 2, el Jardín N° 908, y el CEAT N° 571, guiados por sus maestras, hicieron una semblanza de la importancia del trabajo. Y siguió una escenificación de diferentes tareas, donde hubo pediatras atendiendo bebés, campesinos sembrando (y tirando un poco de tierra a los presentes, de paso) y otras muchas tareas.
Cerró la “función” un desfile de los más chiquititos personificando oficios y profesiones. De la mano o en brazos de sus papis hubo peones rurales, bomberos, cocineras y mecánicos, todos muy orgullosos.
Como broche de oro, se entregaron reconocimientos a varios trabajadores que ya se jubilaron, destacados por su labor y sacrificio:
En Vedia: Nilda Mariani, Silvia Estela Ilariuzzi, Oscar Alberto Campi y Juan Carlos Muñoz.
En Alberdi: Zulma Palavecino, Renée del Carmen D’Aura y “Mateo” Mattievich.
En Alem: María Amelia Pérez y Juan Carlos Vaquero.
En El Dorado:-Oscar Alegre.
En Colonia Alberdi: Gladis Bramajo.
En Fortín Acha: Osmar Algarbe.
Todos recibieron un hermoso diploma, entregado en cada ocasión por los delegados o representantes de su localidad.
Una hermosa ofrenda floral fue depositada a los pies de la estatua del labriego.
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