Usted se hizo cargo de Pami Junín en enero. ¿Con qué panorama se encontró?
-Lo primero que hicimos fue un relevamiento de las agencias, recorrimos las dieciséis para ver cómo están funcionando y cómo es su situación con respecto al personal y a lo edilicio, y quisimos saber cuánto se paga de alquiler, porque la mayoría son lugares arrendados. Me causó sorpresa el hecho de que no haya demasiado personal; al contrario, puede que estén faltando empleados. No sé si este sea momento de nombramientos.
-¿Qué diagnóstico realiza de lo observado hasta ahora?
-El edificio principal del Pami en Junín, ubicado sobre calle Mitre, en verdad es muy deficiente y se está pagando un altísimo alquiler. Después están los dos módulos de orientación e iniciación de trámites –uno en calle Álvarez Rodríguez y el otro en avenida Libertad-, en ambos también falta gente, sobre todo para la atención al público, porque la idea es que quien va a iniciar un trámite no tenga que esperar. Por otro lado, hallamos mucho desorden en lo que es la prestación del servicio de remises, se gasta demasiado en eso. Para darle una idea, un afiliado que viene de Arenales a Junín cuesta mil doscientos pesos, ya sea que venga para la realización de trámites o para una interconsulta, o sea que no se tiene en cuenta brindar esa asistencia solamente a quien no deambula, evidentemente se ha creado la costumbre de que todo sea mediante remise. Eso ha sido muy desordenado.
-¿Eso es para casos especiales?
-Tendría que ser para casos especiales, pero se le da a todo el mundo. Por ahí uno ve a una persona un fin de semana en moto y en la semana le tenés que firmar un viaje en taxi, entonces creo que esas cosas por ahí no se han controlado.
-¿Cómo van a trabajar contra el cobro de plus?
-Queremos erradicar el cobro de plus, que la verdad está muy arraigado y es muy difícil de comprobar. Nos reunimos con el Círculo Médico y exigimos un control de ellos sobre ese asunto. De nuestro lado decimos que todas las denuncias por cobros indebidos pasa al área jurídica para hacer un expediente y después tener las herramientas necesarias para suspender al profesional, al instituto o a la clínica involucrados. Esto es un desafío porque se trata de algo muy distinto a lo que uno ha hecho hasta ahora.
-Mucho se ha hablado de la existencia de "ñoquis" en los organismos públicos. ¿Cómo halló al Pami en ese sentido?
Estamos cambiando de tareas a distintas personas por considerar que son más útiles en otras áreas. Por ejemplo, a un abogado que estaba en sociales lo trasladamos a Jurídicas, o sea que uno está reasignando el personal. De cualquier modo no ha habido muchas designaciones en los últimos años, todo lo contrario, hubo más bien pocas.
-En cuanto a la cobertura de ciertos elementos, como prótesis y audífonos, que eran entregados con mucha demora, ¿cómo están hoy?
-Los audífonos sí eran entregados con retraso. La explicación era que estaban frenados en la aduana, que no podían retirarse, lo que respondía a un tema de política de importación del gobierno anterior. Apenas asumió el nuevo gobierno empezó a normalizarse, se está llamando a la gente que a lo mejor hacía más de un año que estaba esperando para que venga a hacerse de su elemento. Con respecto a las prótesis no es tanta la demora, algunas son otorgadas muy rápido. No obstante, cuando la gente se presenta pide hablar conmigo o con la coordinadora y nosotros agilizamos la cuestión en el momento, llamamos, vemos por qué razón está tardando algo.
-¿Se mantiene en todos los términos el convenio entre Pami y el Hospital Interzonal "Abraham Piñeyro”? Porque se sabe que a partir de algunas falencias que hubo, muchos pacientes decidieron ir a hacerse atender a otros lugares.
-Hubo falencias, el hospital perdió una gran cantidad de cápitas y ahora conserva cerca de cuatro mil, pero va a ampliar servicios para poder recuperar a los que se fueron porque les representa un ingreso muy importante. La nueva dirección de esa entidad está haciendo un esfuerzo para salir adelante, ha cambiado la higiene y un montón de cosas, así que yo entiendo que va a recuperar usuarios.
- En cuanto a la venta de medicamentos que se seguía haciendo a afiliados fallecidos, escándalo surgido en Buenos Aires, ¿se detectó algo parecido en Junín?
No, estamos trabajando en eso pero todavía no se ha determinado.
-¿Cuáles son los objetivos que tiene en mente como responsable del Pami Junín?
- La verdad que es magnífica la función que cumple Pami, porque además de la prestación médica ejerce un rol social de gran magnitud, con talleres para jubilados, pileta, actividad acuática de invierno y muchos otros beneficios. Lo que quiero es mantener eso y cuidar los números del Pami.
-Lo primero que hicimos fue un relevamiento de las agencias, recorrimos las dieciséis para ver cómo están funcionando y cómo es su situación con respecto al personal y a lo edilicio, y quisimos saber cuánto se paga de alquiler, porque la mayoría son lugares arrendados. Me causó sorpresa el hecho de que no haya demasiado personal; al contrario, puede que estén faltando empleados. No sé si este sea momento de nombramientos.
-¿Qué diagnóstico realiza de lo observado hasta ahora?
-El edificio principal del Pami en Junín, ubicado sobre calle Mitre, en verdad es muy deficiente y se está pagando un altísimo alquiler. Después están los dos módulos de orientación e iniciación de trámites –uno en calle Álvarez Rodríguez y el otro en avenida Libertad-, en ambos también falta gente, sobre todo para la atención al público, porque la idea es que quien va a iniciar un trámite no tenga que esperar. Por otro lado, hallamos mucho desorden en lo que es la prestación del servicio de remises, se gasta demasiado en eso. Para darle una idea, un afiliado que viene de Arenales a Junín cuesta mil doscientos pesos, ya sea que venga para la realización de trámites o para una interconsulta, o sea que no se tiene en cuenta brindar esa asistencia solamente a quien no deambula, evidentemente se ha creado la costumbre de que todo sea mediante remise. Eso ha sido muy desordenado.
-¿Eso es para casos especiales?
-Tendría que ser para casos especiales, pero se le da a todo el mundo. Por ahí uno ve a una persona un fin de semana en moto y en la semana le tenés que firmar un viaje en taxi, entonces creo que esas cosas por ahí no se han controlado.
-¿Cómo van a trabajar contra el cobro de plus?
-Queremos erradicar el cobro de plus, que la verdad está muy arraigado y es muy difícil de comprobar. Nos reunimos con el Círculo Médico y exigimos un control de ellos sobre ese asunto. De nuestro lado decimos que todas las denuncias por cobros indebidos pasa al área jurídica para hacer un expediente y después tener las herramientas necesarias para suspender al profesional, al instituto o a la clínica involucrados. Esto es un desafío porque se trata de algo muy distinto a lo que uno ha hecho hasta ahora.
-Mucho se ha hablado de la existencia de "ñoquis" en los organismos públicos. ¿Cómo halló al Pami en ese sentido?
Estamos cambiando de tareas a distintas personas por considerar que son más útiles en otras áreas. Por ejemplo, a un abogado que estaba en sociales lo trasladamos a Jurídicas, o sea que uno está reasignando el personal. De cualquier modo no ha habido muchas designaciones en los últimos años, todo lo contrario, hubo más bien pocas.
-En cuanto a la cobertura de ciertos elementos, como prótesis y audífonos, que eran entregados con mucha demora, ¿cómo están hoy?
-Los audífonos sí eran entregados con retraso. La explicación era que estaban frenados en la aduana, que no podían retirarse, lo que respondía a un tema de política de importación del gobierno anterior. Apenas asumió el nuevo gobierno empezó a normalizarse, se está llamando a la gente que a lo mejor hacía más de un año que estaba esperando para que venga a hacerse de su elemento. Con respecto a las prótesis no es tanta la demora, algunas son otorgadas muy rápido. No obstante, cuando la gente se presenta pide hablar conmigo o con la coordinadora y nosotros agilizamos la cuestión en el momento, llamamos, vemos por qué razón está tardando algo.
-¿Se mantiene en todos los términos el convenio entre Pami y el Hospital Interzonal "Abraham Piñeyro”? Porque se sabe que a partir de algunas falencias que hubo, muchos pacientes decidieron ir a hacerse atender a otros lugares.
-Hubo falencias, el hospital perdió una gran cantidad de cápitas y ahora conserva cerca de cuatro mil, pero va a ampliar servicios para poder recuperar a los que se fueron porque les representa un ingreso muy importante. La nueva dirección de esa entidad está haciendo un esfuerzo para salir adelante, ha cambiado la higiene y un montón de cosas, así que yo entiendo que va a recuperar usuarios.
- En cuanto a la venta de medicamentos que se seguía haciendo a afiliados fallecidos, escándalo surgido en Buenos Aires, ¿se detectó algo parecido en Junín?
No, estamos trabajando en eso pero todavía no se ha determinado.
-¿Cuáles son los objetivos que tiene en mente como responsable del Pami Junín?
- La verdad que es magnífica la función que cumple Pami, porque además de la prestación médica ejerce un rol social de gran magnitud, con talleres para jubilados, pileta, actividad acuática de invierno y muchos otros beneficios. Lo que quiero es mantener eso y cuidar los números del Pami.
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