Prandi acusa sin fundamentos. Pero lo entendemos, puesto que es coherente con todo Cambiemos, que lo único que sabe es responsabilizar al kirchnerismo de todos los males que ellos mismos han generado.
Es evidente el intento de poner el foco en los hechos lamentables del final del acto para no tener que hablar de los motivos de la convocatoria. Una conducción gremial reticente a confrontar con el Gobierno, no tuvo más remedio que escuchar a las bases y convocar a la protesta ante una situación que se desmadra cada día más. El desempleo creciente, la pérdida de poder adquisitivo del salario, el aumento de la pobreza y de la indigencia son los verdaderos motivos de la exigencia de poner una fecha cierta al paro general, eso que la cúpula de la CGT no hizo. Ese pedido es un sentir popular, no una conspiración. Lo numeroso y lo variado de la concurrencia demuestran que los discursos se quedaron corto respecto a lo que se esperaba en la calle.
Prandi acusa al kirchnerismo de no respetar el juego de la democracia. Durante los doce años que nos tocó gobernar, ganamos y perdimos elecciones. Cuando nos tocó perder por un punto, no denunciamos fraude y reconocimos el resultado apenas se conoció. Desde su partido, en cambio, acostumbran a denunciar fraude durante semanas previas a cada elección, cosa que nunca prueban y que olvidan si el resultado es mínimamente decoroso para ellos. Es justo recordarles, también, que el gobierno de CFK tuvo que soportar, apenas asumido, el asedio y el desabastecimiento de las ciudades por parte de los piqueteros de la mesa de enlace, a la que su coalición cívica alentó en esos métodos. Estos campeones de la democracia y el respeto a las leyes son flojitos de memoria.
Y dice, también, que los principales referentes de nuestro movimiento están siendo investigados por la Justicia. En quince meses de gobierno, esta Alianza tiene como cincuenta funcionarios procesados. Su Presidente encabeza el ranking mundial de mandatarios acusados por corrupción. Y eso, habiendo accedido ante cada exigencia planteada por las corporaciones. ¿Se imaginan lo que sería la imagen de este gobierno si hubiese enfrentado los intereses de los sectores dominantes, como lo hizo el kirchnerismo?
Lo que mueve a risa es el adjetivo “residual” para referirse al kirchnerismo. Cristina encabeza todas las encuestas aún antes de proclamar su intención de ser candidata. Parece que los muertos que Prandi mata gozan de buena salud.
(*) Licenciado en Sociología, profesor de la Cátedra Libre “Tierra, Techo y
Trabajo” de la Unnoba y militante kirchnerista.
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