Los empleados estatales reclaman más aumentos

Los gremios estatales resolvieron profundizar la ofensiva en procura de que se reabra la discusión salarial con el gobierno bonaerense. Con el argumento de que el aumento otorgado en marzo fue prácticamente absorbido por el alza del costo de vida, reclamaron ayer la reapertura de la negociación paritaria para comenzar en forma "urgente" la negociación por una nueva mejora en los sueldos.
Los sindicatos nucleados en Fegepba oficializaron el pedido a través de una nota que remitieron al ministro de Trabajo, Oscar Cuartan-go, y anticiparon que, además, buscarán formalizar aún más el reclamo ante el propio gobernador Daniel Scioli al que le pedirán una audiencia.
El planteo efectuado ayer por este sector de los gremios estatales se suma a la concretada días pasados por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), que planteó la "necesidad" de reabrir la negociación paritaria para pedir una nueva discusión salarial.
En ese marco, el secretario general de la Fegepba, Fotios Cunturis, indicó que "hemos decidido remitir una nota al ministro Cuartango, para que en forma urgente convoque a la paritaria general y considerar una recomposición salarial, porque entendemos que desde el último aumento que se ha otorgado hasta la fecha, se han producido fuertes incrementos en la canasta alimentaría".
El dirigente reafirmó que el pedido apunta a "acordar una recomposición de salarios".
El nucleamiento sindical denunció además "incumplimientos" oficiales respecto de las recategorizaciones en varias reparticiones públicas. "Esto fue acordado a principio de año y hasta la fecha muchos compañeros de la administración pública no han recibido el importe correspondiente a esas diferencias", señaló Cunturis.
Para apuntalar el reclamo, los gremios aducen que el acuerdo salarial de marzo se cerró "en disconformidad". Por lo tanto, sostienen que nunca renunciaron a seguir analizando con el correr de los meses la cuestión salarial con el gobierno de Daniel Scioli.
La preocupación central pasa por la inflación y cómo se viene erosionando el poder de compra de los trabajadores. "El alza del costo de vida prácticamente pulverizó el aumento de marzo", dicen desde ATE.
Pero además, algunos de los gremios pujan por lograr, más allá del aumento en sí, una recomposición por una vía indirecta, como el "blanqueo" de las bonificaciones no remunerativas que aún cobran los empleados.
El "blanqueo" es perseguido por los sindicatos porque no sólo mejorará los sueldos vía el incremento de los básicos y de la bonificación por antigüedad, sino que además se trasladará a los haberes de los jubilados.
En realidad, el propio Estado dio una señal en ese sentido con el último incremento salarial, que incluyó el pase de algunos de esos ítems al sueldo básico o su transformación en sumas remunerativas.
Del mismo modo, se pretende que las Urpes (un complemento salarial que se paga discrecionalmente en el Estado) también tenga aportes y se garantice un mínimo para todos los estatales.
La otra vía indirecta de aumento que proyectan los trabajadores tiene que ver con la discusión de un nuevo estatuto-escalafón al menos en la Ley 10.430. Una modificación de categorías también impactaría directamente sobre los sueldos de bolsillo de los empleados, tal como se viene pidiendo desde ATE.