“La Provincia se dispone a abrir la negociación salarial con los docentes en la segunda quincena de este mes”.
PANORAMA PROVINCIAL

El inicio de las clases, un round electoral anticipado que imagina la Gobernadora

Cuando María Eugenia Vidal resolvió que no podía seguir alimentando de capítulos el culebrón del verano en el que se había transformado el proyecto para adelantar las elecciones bonaerenses, también tomó otra decisión central: atar buena parte de su suerte y su futuro a Mauricio Macri.
La Gobernadora comenzaba a sentir que no iba a poder doblegar la resistencia de la Casa Rosada y operó en consecuencia. También, que mantener latente la discusión podría terminar erosionando su figura. Cambiemos se ha venido jactando de promover mejoras en la calidad institucional. Y la especulación en torno del calendario electoral para acomodarlo a las necesidades políticas oficiales impactaba de lleno justamente sobre uno de los activos de Vidal.
Al gobierno bonaerense y a la propia candidata a la reelección  -la mandataria todavía no lo confirmó pero es un secreto a voces- le queda ahora el enorme desafío de equilibrar una balanza que se salió de centro. Sencillamente, porque el Presidente tiene una aprobación entre los bonaerenses de unos diez puntos por debajo de la que consigue la Gobernadora.
El escenario asoma complejo para el oficialismo porque Cristina Kirchner surge en la Provincia como la posible candidata presidencial más votada con promedios cercanos a los 40 puntos, según indican diversas encuestas.

La economía en el centro del debate
En la Provincia creen que, tal como están planteadas las cosas, será muy difícil salirse de la discusión presidencial. Estiman que terminará relegando a los temas bonaerenses a un segundo plano con la economía ganando el centro del debate. Pero igual, no se resignan.
La figura de Vidal, aun cuando no pudo eludir la erosión que sufrieron las principales espadas de Cambiemos, mantiene una buena ponderación pública. Tanto, que es una de las dirigentes nacionales más valoradas. Por eso, luego de aquella decisión crucial sobre el calendario electoral, cerca de la mandataria anuncian ahora que se viene una doble etapa en el proceso pre electoral.
La primera de ellas tiene que ver con “provincializar” la discusión lo más que se pueda. La idea es poner en escena la figura de Vidal en recorridas por la Provincia e inauguraciones de obras. En varias de esas actividades estará acompañada del Presidente. La obsesión, sin embargo, está proyectada a lo que ocurra de acá a un mes. Todos los cañones oficiales están apuntados al comienzo de las clases y al principal obstáculo que, creen en el oficialismo, se interpone entre los deseos de Cambiemos y ese objetivo: Roberto Baradel.
La cabeza visible del Frente de Unidad Docente forma parte de todos los análisis oficiales. Cerca de Vidal se empeñan en vincular su actitud dura en la negociación salarial con su identificación con el kirchnerismo. Las versiones sobre una posible candidatura del dirigente sindical alimentan una posibilidad que, para el oficialismo, comienza a tomar forma de certeza: más allá de la propuesta de aumento para este año que se ponga sobre la mesa paritaria, creen que existe una decisión sindical de ir de todas maneras al paro.

El inicio de clases, el desafío
La Provincia abriría la negociación en la segunda quincena de este mes. Sabe de antemano que una propuesta similar a la que aceptaron los gremios estatales (20 por ciento para todo el año con aplicación de cláusula gatillo para el primer semestre) no convencerá a los maestros. 
¿Habrá una oferta mejorada que apunte a acercar posiciones? Para Vidal, el arranque de las clases en término es un desafío central. Cambiemos viene preparando, desde el mes pasado, una serie de acciones en busca de generar presión y masa crítica frente a un escenario de posibles medidas de fuerza.
La lógica oficial es que, más allá de que no exista acuerdo por los sueldos, el ciclo lectivo se inicie, según lo previsto, el 4 de marzo. A eso apelarán Vidal y sus funcionarios en cada una de sus apariciones. Quizás sumen refuerzos en esa cruzada y en las redes sociales aparezcan figuras muy conocidas del espectáculo y el deporte apelando a que los chicos no pierdan días de clase.
El otro trabajo subterráneo pasa por sumar a las denominadas mesas distritales armadas para contrarrestar a los gremios y difundir las acciones oficiales en materia educativa, a docentes y directivos. La idea de incorporarlos al debate sobre la infraestructura escolar y los planes de capacitación docente esconde otro objetivo: erosionar una posible convocatoria al paro y restarle adhesión.
La pulseada apenas está en etapa embrionaria.