Pintura

Una de las pasiones “de siempre” de Vargas es el dibujo y la pintura, disciplinas en las que se formó en el Instituto de Arte Junín, donde conoció a Nené Gralatto. Aún hoy sigue vinculado con esa academia dado que, a partir de su gusto por las artes plásticas, trabajó en escenografía. “De vez en cuando lo sigo haciendo junto con Nené –cuenta– y me gusta mucho porque, más allá de la amistad, hay una vocación por el arte que nos une”.

COMENTARIOS