En enero, la canasta básica total (CBT) -que establece el umbral de la pobreza-, aumentó 20,4%. Así, una familia de cuatro integrantes (dos adultos y dos chicos) necesitó $596.823 para no ser pobre. En los últimos 12 meses, subió 264,9%. Los datos fueron difundidos por el INDEC.
Por su parte, la canasta básica alimentaria (CBA) -que marca el umbral de ingresos que se debe superar para no ser indigente- subió 18,6% el mes pasado. Por lo tanto, la misma familia de cuatro integrantes necesitó de $285.561 en el primer mes de 2024 para no caer en la indigencia. En los últimos 12 meses, el costo se incrementó 296,4%.
Ambas canastas crecieron en sintonía con la inflación de enero, que alcanzó el 20,6% y 254,2% en los últimos doce meses. En el acumulado interanual, la CBT aumentó 264,9% y la CBA 296,4%. En diciembre, la canasta básica había marcado que para no ser pobre se necesitaban $495.798, siempre hablando de una familia integrada por una pareja y dos hijos.
Por su parte, para no caer en la indigencia se requerían $240.679. La variación mensual de la CBA en diciembre había sido del 30,1%, mientras que la de la CBT había sido de 27% con respecto a noviembre, ambas por encima de la inflación, que fue del 25,5% ese mes.
El último dato oficial de pobreza, correspondiente al primer semestre del año pasado, marcó que el 40,1% de la población había caído en esta condición. El próximo dato oficial llegará recién en marzo y aún no tendrá el impacto de la fuerte inflación de enero.
En el dato difundido por el INDEC se calculó que la línea de indigencia para la unidad estadística de un “adulto equivalente” fue $92.415. En el caso de la pobreza, fue de $193.147.
Un hogar de tres integrantes necesitó $227.340 para no ser indigente y $475.141 para no ser pobre. Por último, la CBA para una familia de cinco miembros asciende a $300.348 y la CBT se ubica en $627.727.
El Gobierno, en tanto, estimó que después de la devaluación de diciembre y el salto de la inflación al 25,5% -la más alta en 30 años-, la pobreza ya orillaba el 50% de la población. El salario mínimo, vital y móvil está congelado en $156.000 desde diciembre. Esto implica que se necesitan casi cuatro ingresos básicos de ese valor para superar la línea de pobreza. El Gobierno convocó para hoy al Consejo del Salario para revisar ese valor y acordar un aumento. La CGT ya anunció que pedirá una recomposición de 85%.
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