Cientos de personas se dieron cita en el Planetario porteño en plena madrugada para observar la "Luna Roja", la eclipse lunar total que pudo verse en todo el país a simple vista. Con muchas reposeras, el acompañamiento de termos y mates, además del asesoramiento de astrónomos del predio situado en el barrio de Palermo, familias desafiaron el fresco de la madrugada, cuando la temperatura descendió a unos 11 grados, para observar el espectáculo que regalaba el cosmos.
El personal del observatorio, además de poner a disposición los telescopios, ofreció una medialuna a los asistentes, que también disfrutaron de malabarismos y otros espectáculos callejeros. En el Planetario calcularon en unos cinco mil los asistentes a los jardines que rodean el semiesférico edificio que la ciudad le dedica a la difusión y práctica de la astronomía.
La Luna entró en el cono de sombra de la tierra cerca de la 1:00, a las 4:00 alcanzó su color rojizo gracias al reflejo de la atmósfera terrestre y culminó el ciclo a las 6:20, cuando recuperó su habitual brillantez en su totalidad, al retirarse totalmente la sombra del planeta.
El eclipse de este martes, que fue observado en toda la Argentina y en forma parcial en el resto de América, fue el primero de la llamada "tétrada", que consiste en cuatro acontecimientos similares con un intervalo de unos seis meses, en el curso de dos años.
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