EL SISTEMA DE IMPRESIONES DIGITALES CREADO POR JUAN VUCETICH FUE PIONERO / WEB
EL SISTEMA DE IMPRESIONES DIGITALES CREADO POR JUAN VUCETICH FUE PIONERO / WEB
ENTRE LA FICCIÓN Y EL PERIODISMO

Tras las huellas de Juan Vucetich

La segunda novela de Hugo Alconada Mon: La cacería de Hierro. Trata sobre el primer homicidio esclarecido por el sistema de las impresiones digitales

Hugo Alconada Mon (1974) se encuentra a medio camino entre el periodismo y la novela. Y así va en su derrotero profesional, como una suerte de tupac-amaru entre ambas tareas que lo tironean, cada una para su lado. Pero en las dos lo acompaña y seguramente consuela una numerosa legión de lectores.

Acaba de publicar su segunda novela –La cacería de Hierro (Planeta, 2024)- que ya es un éxito de ventas. Se trata de la primera vez en que la dactiloscopia, es decir el estudio de las impresiones digitales para identificar las personas a través del sistema creado por Juan Vucetich, sirvió para esclarecer un homicidio en la historia.

Se trató del horrible asesinato de dos chicos, Ponciano, de cinco años y Felisa de tres- que murieron degollados en un campo cercano a Necochea a fines del siglo XIX. Los detectives y policías de La Plata fueron a ese lugar y asesorados por Vucetich desde nuestra ciudad lograron salvar a un primer acusado y adjudicar la autoría a otra persona.

Hierro es Valentín Hierro, un personaje de ficción que representa al primer detective científico que tuvo una provincia como la de Buenos Aires, que a lo largo de su historia – y sobre todo en los últimos años- se mostró dubitativa y errática a la hora de investigar crímenes.

Nadie olvida, sobre todo en nuestros pagos, a la bella profesora de inglés secuestrada y asesinada con alevosía en la pasada década del 80 en La Plata. Una semana después de su desaparición, la Policía bonaerense pudo convocar al único detective existente en la Repartición, entonces se encontraba investigando otro homicidio en el Gran Buenos Aires. Llegó, averiguó lo que había y su dictamen fue lapidario: “se perdió un tiempo precioso en las 72 horas posteriores al crimen, de modo que esta muerte va a quedar impune” , dijo.

Y así fue nomás, los acusados salieron todos en libertad y el crimen quedó impune, como suele suceder. Sin embargo, un siglo antes el detective Hierro, discípulo del riguroso Vucetich que lo formó, logró desentrañar un episodio que fue real. Los otros policías que secundan a Hierro en la cacería son reales: el comisario Eduardo Alvarez, el jefe de la Policía bonaerense que se llegó hasta Necochea, Guillermo Nunes, y el comisario de Necochea, de apellido Blanco.

Todo pareciera indicar que La cacería de Hierro se trata de un libro de ficción, pero ocurre que el yo del periodista no lo suelta a Alconada Mon. Entonces busca una salida intermedia y a veces piensa que lo que redacta como autor literario pertenece al género de la novela histórica. Sobre esa combinación se acaba de dar una prueba: hay policías de ficción (Hierro y otro, Rassio, creados por el autor del libro), y otros que existieron, que fueron personas reales, como los nombrados arriba.

Ocurre que para escribir este libro recién editado y que ya es best-sellers al igual que el primero, La ciudad de las ranas (Planeta 2022), Alconada Mon recorrió y consultó en siete museos policiales e investigó en archivos judiciales de la Nación y la Provinciavisitó decenas de bibliotecas –entre otras la de la Universidad de La Plata, la Central bonaerense, la de la Legislatura y el Archivo Histórico de la Provincia-, consultó los archivos de EL DIA y La Nación, se conectó con museólogos de Zagreb, con bibliotecarios de Iowa, Michigan, Nue-

 

La cacería de Hierro

  • HUGO ALCONADA MON
  • Editorial: Planeta
  • Páginas: 240 Precio: $ 27.600

 

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