Soledad Brítez, mamá de Salvador, contó que su hijo de cinco años sintió curiosidad por la historia del General San Martín y desde entonces se volvió su fanático.
"Preguntaba quién era el que estaba en el billete de cinco pesos y con el padre le contamos quién era San Martín. Luego miraba videos por Internet. Cuando empezó la escuela estaba esperando los actos patrios para vestirse del prócer", contó la madre del Salvador.
El pequeño, lejos de escoger a un superhéroe de películas o de dibujos animados, eligió a San Martín como personaje central para festejar su cumpleaños y contó que muchos de sus compañeros no lo conocían, por lo que tuvo que explicarles de quién se trataba.
Salvador eligió admirar a un personaje real y sumamente importante para nuestra historia. Así nos demuestra que un verdadero héroe no necesita capa ni superpoderes, sino que con su compromiso, amor, valentía y lucha, pudo llegar muy lejos.
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