El Quinteto Bataraz aparece en la escena con su disco debut -se llama igual que la formación- y una propuesta que promete ganarse un espacio entre las formaciones más destacadas del folclore. Lisandro Baum es el pianista del grupo, además de haber sido el gestor del quinteto, que inicia su viaje mostrando su logro que promete un extenso y rico recorrido.
-¿Cómo surgió el Quinteto y cuál es la búsqueda?
-Hacía varios años que tenía en la cabeza la sonoridad de este quinteto, inspirada en nuestra música folclórica reinterpretada desde una formación instrumental tanguera y con una manera de arreglar, de desarrollar la "obra", también típica del tango. Esperé a tener cuatro arreglos escritos y empecé a llamar a los músicos. En muy poco tiempo el grupo creció y pudo estar en condiciones de entrar a un estudio y registrar un buen material, pero la gran sorpresa y empujón final para que aparezca el disco lo dio el Fondo Nacional de las Artes, que nos otorgó el Primer Premio a la producción discográfica en folclore.
-¿Qué dice el disco del Quinteto Bataraz?
-Dice que la música argentina es enorme y diversa; que la figura del "cantor nacional", aquel que hacía tango y folclore, está vigente en diversas formas; que hay muchas ganas de sumar a la música argentina de origen rural reinterpretaciones que puedan hablarle a otra gente y de esta forma ampliar el publico y difundir estas obras y compositores que tanto nos emocionan en circuitos que no son escuchados.
DISCO DEBÚT DE LA FORMACIÓN
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