'La Corte del Faraón' devuelve la opereta a la escena local

La corte del Faraón "una opera, zarzuela vodevil y revista; bíblica y picaresca", como anuncian sus productores, nació como proyecto conjunto de Hernán Salem (director de arte), Facundo Abraham (director general) y Santiago Sirur (protagoniza al Casto José), basada en la adaptación de Claudio Gallardou.
El proyecto fue tomando fuerza y nombres resonantes del teatro independiente y del género musical se fueron sumando hasta conformar un nutrido elenco, con 27 actores en escena, que mientras el texto se desliza, actúan, cantan y bailan narrando la parodia de una corte egipcia a la cual regresa el triunfante general Putifar (Federico Moore).
Al guerrero le regalan como esposa a Lota (Florencia Benítez), quien quiere satisfacerlo y satisfacerse sexualmente, sin sospechar que Putifar ha quedado mutilado en la guerra. A su vez, Lota recibe como regalo a un esclavo: el Casto José, (Santiago Sirur) quien no quiere cumplir los deseos de su ama, y ni de las muchas mujeres que se lo disputan.
Así, en tono de comedia doble sentido va transcurriendo la obra, acompañada siempre por un piano en vivo a cargo de Matías Chapiro, donde el texto está construido con la métrica y la rima propias de cada ritmo.
Santiago Sirur, quien compone a Casto José, sobre el que recae el peso de la historia, en diálogo con Edición Nacional, explica que ha construido este personaje sobre "la base de una persona que no tiene el deseo sexual abierto, más allá de la comicidad del texto que es muy rica".
El actor que ha trabajado en musicales como El Fantasma de la Ópera o Drácula, intenta en este personaje, "no hacer una mera repetición, sino ir buscándole vida al personaje, porque uno en la vida no está siempre igual y el Casto no va a estar igual en todas las funciones". Y esta idea de un Casto José vivo llega al público.
Además de Sirur es especialmente fuerte la actuación de Ana Fontán, con una muy divertida y poderosa Sul. En tanto el vestuario destaca el tono paródico con una mezcla de estilos y épocas muy acorde.
Debajo del escenario a Sirur le pasan otras cosas con esta Corte... "este es mi primer proyecto propio grande, y la verdad es que es mucho trabajo", agrega.
"Toda la gente que está en el elenco son amigos" y eso es algo que se nota más allá de la obra, algo, un clima sobrevuela el escenario.
"Es un verdadero sacrificio hacer teatro independiente" asegura, "hay mucha inversión propia y algún esponsoreo", pero básicamente el grupo trabajó en pro de esta Corte que hoy tiene su lugar en El Cubo (Zelaya 3053), los lunes a las 20.