El sueño de los nenes, un problema

Compartir la cama de los padres con los nenes es producto de un problema recurrente y no menor: el sueño de los más chicos suele ser un gran inconveniente en la rutina familiar. Según un relevamiento realizado hace unos años por profesionales del Hospital Posadas, de hecho, sólo el 18,7% de los niños duerme toda la noche durante el primer año de vida, y apenas el 35,9% lo logra al año siguiente.
La mayoría de los expertos coincide en que, después de los tres meses de vida, el bebé está capacitado para dormir al menos cinco o seis horas de corrido sin alimentarse. Con todo, el 25% de los chicos de este estudio se despertaron dos o más veces de noche, lo que habla de conductas aprendidas que le impiden un descanso acorde a su maduración.
Lo ideal, se apunta, es sacar al bebé del cuarto de los padres entre los 3 y 6 meses, porque ya puede dormir 6 horas de corrido. Entre los 5 y 8 meses es probable que se despierte y llore, porque es la etapa en que asume la separación con su madre y se angustia. Los especialistas dicen además que no se debe acostumbrar al bebé a dormirse mamando o paseando en el cochecito o en el auto, porque cuando se despierte va a querer recrear esa misma situación.