Un elenco italiano deslumbró en la fiesta del teatro que vive Córdoba

El dolor más visceral en la conflictiva relación padre-hijo, acompañado por la impecable actuación de Giorgio Di Bassi y Francesco Guida son las claves que hicieron de "Mishelle Di Saint'Oliva", escrita y dirigida por Emma Dante, una pieza que conmovió hasta las raíces al Festival Internacional de Teatro Mercosur.
La obra que también será parte de la programación del VII Festival Internacional de Buenos Aires (FIBA), muestra a dos hombres solos con la presencia intangible de una madre ausente quienes conforman una trama oscura donde el odio y el amor se entremezclan con una desgarradora violencia.
Los actores, radicados en Palermo (Italia), reconocen que un fuerte machismo tiñe las relaciones sociales, "aunque en todos los países cuando los hombres tienen un hijo homosexual se produce en ellos un profundo rechazo sin dejar por eso de amarlo", explicó a Télam Di Bassi. La obra de Dante resulta carnal, visceral, violenta y profundamente humana, dando lugar, además, a ráfagas de humor.
Con puntos de contacto con nuestro grotesco, el espectáculo da lugar a varias capas de lectura de ese mundo sórdido, oscuro y por momentos vejatorio en que viven los dos hombres.
"El texto es fruto del trabajo del grupo –señaló Di Bassi– Emma trajo la idea y a partir de eso nosotros trabajamos con improvisaciones que ella tomó como base para crear el texto".
"Esa primera etapa de estudio –acotó Guida– dio origen a una historia breve que luego se fue agrandando durante la etapa de ensayo".
"Emma sabe aprovechar bien la animalidad de los actores como nosotros", definió Di Bassi. Y eso se hace evidente en la actuación visceral y profundamente comprometida, con un modo de asumir el cuerpo casi felliniano y un notable ejercicio de la libertad expresiva.
Si bien Dante se ha caracterizado en trabajos anteriores por conformar habitualmente elencos jóvenes, en esta oportunidad aprovechó la experiencia actoral de Di Bassi, quien se define como "un viejo muy particular que ha buscado siempre un vínculo con la juventud porque los viejos tienen que aprender de los jóvenes para poder comprender lo que piensan y sienten".