Denuncian presiones del Ejecutivo municipal durante el paro nacional del jueves pasado

Gremialistas de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) denunciaron presiones del Ejecutivo Municipal hacia los trabajadores municipales. El paro nacional de veinticuatro horas programado por la CGT fue acatado por parte del movimiento obrero, en tanto que otros sectores decidieron no adherir.
Esto dejó como balance una sensación de malestar por un lado, y por otro, de alivio, cuando el paro pasó y se retomó la actividad. En Lincoln varios servicios fueron afectados por la medida de fuerza del jueves último.
En la tarde-noche del miércoles, los trabajadores nucleados en el Sindicato de Choferes de Camiones de Lincoln se concentraron en la rotonda, donde acamparon y cortaron el flujo vehicular de camiones hasta las cero horas del jueves 10 de abril.
Este sector tuvo el acatamiento de los trabajadores de Fueguina, quienes se manifestaron suspendiendo la recolección de residuos.
En adhesión a los reclamos por mejoras salariales, actualización de las asignaciones familiares, de la adecuación del impuesto a las Ganancias, de la seguridad y de paritarias libres, cientos de trabajadores de Lincoln se adhirieron al paro, otros trabajaron de manera parcial y en otros casos los empleados concurrieron a trabajar normalmente.
Frente a este panorama, el referente de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), Ricardo Sicurello, aseguró que existió “presión y apriete total por parte del Ejecutivo, que obligó a que todos los trabajadores vayan a trabajar”. “Muchos compañeros querían hacer paro, pero recibieron amenazas, mediante las cuales se les manifestaba que si no se presentaban a trabajar, podrían descontarles el día o ser despedidos”, dijo.
“Esta situación es muy grave y lamentable. El apriete se dio tanto en el corralón municipal como en el hospital, donde  personal de cocina había decidido sumarse a la medida de fuerza y lo obligaron a no hacerlo”, manifestó.

Otros sectores

Los docentes de UDEB Lincoln y Udocba, se plegaron al paro y no dictaron clases. En este contexto, en varias aulas de las escuelas públicas de la ciudad y del Distrito no hubo dictado de clases.
En lo que respecta a las estaciones de servicio de Lincoln, los playeros no se adhirieron a la medida de fuerza al cien por ciento, pararon a la mañana y por la tarde funcionaron normalmente. En el caso del Automóvil Club Argentino (ACA) confirmaron que la atención al cliente en la playa de estacionamiento fue normal. Quienes sí se manifestaron a favor fueron los empleados gastronómicos (cuyo gremio preside a nivel nacional Luis Barrionuevo), quienes no concurrieron a sus lugares de trabajo.
Otro de los sectores que tuvo actividad reducida fue el de la terminal de ómnibus, donde desde el comienzo de la acción gremial no hubo salida de micros de larga distancia.
En tanto, otra de las dependencias locales que cerró sus puertas fue la oficina de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (Arba).