La Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires realizó una nueva sesión ordinaria con modalidad de presencialidad mixta. La sesión contó con la presencia de las autoridades de la Cámara y los presidentes de bloque, manteniendo el distanciamiento social. El resto de los diputados y las diputadas sesionaron de forma remota, a través de la plataforma digital desarrollada especialmente para llevar a cabo las sesiones. En esta sesión se aprobó el proyecto de los legisladores de Chacabuco Agustín Máspoli y Micaela Olivetto para que Chacabuco cuente con un Juzgado de Familia. Previamente, había sido aprobado por el Senado de la Provincia.
En diálogo con Democracia, el senador Agustín Máspoli señaló que “teníamos la demanda de necesidad del Juzgado de Familia, gente que la ha tocado por distintas situaciones, y había que elegir entre ir a Junín, que está con muchos casos, o al Juzgado de Paz local, que tiene mucha competencia, en todo tipo de tareas, pero están con muchas cosas y no tienen gran capacidad para algunos temas específicos” y agregó: “En un juzgado de Familia puede haber demanda por alimentos, pero también un caso grave de violencia de género. Es una demanda que teníamos de profesionales e instituciones”.
En otro orden, el senador Máspoli agregó que “nosotros tenemos mayoría en el Senado, pero no en Diputados y ahí se traba mucho la dinámica legislativa, entonces la mejor opción era hacerlo en conjunto con la diputada Micaela Olivetto, del Frente de Todos, que también estaba con este mismo tema en agenda; presentamos los proyectos espejo, en las dos cámaras, con el compromiso de que el que saliera primero, lo tomaba el otro, en la otra cámara, y así fue. En el Senado pudimos darle media sanción rápidamente y en Diputados, después de la primera o segunda sesión después de nuestra media sanción, lo pudo sacar. Así que el Juzgado de Chacabuco es ley”.
“Fue un trabajo en conjunto entre el senador Agustín Máspoli y la diputada Micaela Olivetto, esto va a acelerar muchos procesos judiciales en nuestra ciudad con respecto a la familia, pero también estoy contento porque Chacabuco puede empezar a transformarse en un polo judicial, que es importante para la ciudad y para la zona”, dijo a este diario el intendente local, Víctor Aiola y agregó: “También es importante remarcar que las cosas suceden y ocurren cuando se dejan de lado la mezquindades políticas y se trabaja en conjunto”.
Por otro lado, la diputada Micaela Olivetto, dijo a Democracia: “El proyecto de ley es parte de una demanda muy fuerte que se manifiesta desde hace mucho tiempo, tiene que ver con la diferencia que existe entre la posibilidad de acceder a un proceso especializado, etapa prejudicial y tener el equipo interdisciplinario para adoptar la temática, que cuentan quienes pueden acceder a un Juzgado de Familia, y quienes tienen que acceder al proceso a través del Juzgado de Paz, que hace su mayor esfuerzo, pero que no tiene el equipo técnico ni recursos para abordar esta materia tan sensible como es la de Familia, que incluye alimentos, adopción, filiación, violencia de género” y agregó: “Frente a esta demanda, nos pusimos de acuerdo con el senador Máspoli para impulsar los dos el proyecto al mismo tiempo, con el compromiso de seguir adelante con el que obtuviera media sanción primero, dejando de lado mezquindades políticas”.
“Llevé adelante reuniones con distintos sectores, para construir un proyecto que sea representativo y participativo, tuvimos el apoyo del Colegio de Abogados del departamento judicial Junín, del Colegio de Magistrados, de las dos juezas de familia, de la Casa de Justicia de Chacabuco, de la Asociación de Abogados de Chacabuco, y de distintos actores, profesionales, de distintas materias que intervienen en las causas de Familia y trabajan esta temática”, apuntó Olivettó y añadió: “Llevamos adelante un foro de participación, más de 150 personas hicieron su aporte, contamos con la presencia de Marisa Herrera, que es una abogada prestigiosa y nos manifestó los desafíos a la hora de acercar la Justicia de Familia a territorio, hay familias vulnerables que no tienen la posibilidad de irse hasta Junín para poder tener acceso al equipo interdisciplinario y proceso prejudicial, principalmente; también descongestionar el trabajo del Juzgado de Paz”.
Por otra parte, Olivetto apuntó que “en cinco meses pudimos sancionar esta ley, hubo voluntad política, se pusieron por delante las necesidades de los chacabuquenses, ahora tenemos la instancia de poner en marcha este Juzgado para que se materialice lo antes posible, para llevar soluciones a las familias que lo necesitan; además, esto implica una oportunidad muy importante de conformar un equipo con perspectiva de género para dar tratamiento como corresponde, desde la Justicia, a estos temas tan delicados”.
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