Los policías rurales, así como también médicos y docentes, son una figura clave en las zonas de campo abierto, sobretodo, porque en muchos casos su trabajo excede lo estrictamente vinculado a la materia y el aspecto humano se fortalece. En Chacabuco, el Comando de Prevención Rural se encuentra en la estación de trenes del ex ferrocarril San Martín, en la localidad de Cucha Cucha, a unos nueve kilómetros de la ciudad, cuenta con 24 efectivos y cuatro patrulleros.
En diálogo con Democracia, Obdulio Gómez, titular de la dependencia policial rural, contó cuál es la dinámica de trabajo y cuáles son los delitos más frecuentes en los campos y estancias. También reflexionó acerca de la calidez humana y el vínculo estrecho con los vecinos que caracteriza a los policías del Comando de Prevención Rural de Chacabuco.
- ¿Cómo trabajan los policías rurales en Chacabuco?
- Nosotros somos 24 efectivos y contamos con cuatro móviles policiales, tenemos sectorizadas las hectáreas de campo del partido de Chacabuco y cada móvil debe realizar las recorridas en su sector. Nosotros buscamos que cada móvil tenga conocimiento de los vecinos de la zona, por eso se hacen entrevistas con ellos, se intercambian teléfonos, y entonces, si pasa el móvil en horario nocturno y divisamos que la portada de ingreso está abierta nos fijamos de qué establecimiento se trata, llamamos al productor rural y le consultamos si él dejó abierto, si dice que no, procedemos a ver si hubo algún tipo de delito.
- ¿Hay menos delitos que antes en los campos?
- Notoriamente, con la prevención, las recorridas y la implementación de la superintendencia de Seguridad Rural y el CPR, el delito rural ha bajado en toda la provincia de Buenos Aires. Al sectorizar hay más control. Los delitos rurales más comunes son el abigeato, que es el faenamiento de animales, o los hurtos y robos en las viviendas ante la ausencia de los propietarios. Nosotros realizamos muchas contravenciones en cuanto a la existencia de cazadores, mayormente en invierno, hay pescadores también que no cumplen con la reglamentación. Se controlan los vehículos, que tengan documentación, hacemos operativos de manera sorpresiva en los caminos rurales, todo para que haya prevención y que descienda el delito.
- En cuanto a la caza y la pesca, ¿cuáles son los puntos de la ley que no cumplen?
- La Ley Provincial de Pesca indica que los pescadores tienen que estar autorizados con un carnet, si lo tienen, ya pueden pescar pero no pueden utilizar mediomundo o red, en ese caso se labra el acta. El año pasado tuvimos un ciudadano chino en Chacabuco que utilizaba un artefacto eléctrico para captar peces, a través de un sistema de baterías; ponía un mediomundo de alambre en el agua y mandaba descarga eléctrica.En cuanto a cazadores, está prohibida la caza de liebres con perros galgos, por más que tengan autorización o permiso. Se labran innumerables contravenciones y luego les llega la multa.
- ¿Qué le sugieren hacer a los vecinos rurales en caso de advertir situaciones fuera de las habituales?
- Nosotros tenemos un teléfono celular que está dentro del móvil policial, el número es 2364553462. De inmediato tomamos conocimiento y nos podemos trasladar hasta el lugar. Les pedimos a los vecinos que denuncien, que si advierten situaciones extrañas, nos avisen; si ven vehículos o motos extraños, que nos llamen, nosotros estamos para ir. Nosotros decimos que es mejor llegar y que se trate de un vecino que se le rompió el auto y no de un delincuente. Los vecinos, más que nadie, conocen los movimientos del lugar así que es bueno que avisen. También pueden ponernos al tanto sobre cazadores, pescadores, animales sueltos en las rutas, que avisen así podemos asistir y brindar una solución.
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