La concejal radical Laura Pico rechazó la rendición de cuentas 2017 y justificó que “para poder acompañar uno tiene que tener certeza y el poder de control para auditar, cosa que se dio fuera de tiempo, a media máquina y con información retaceada. Así nosotros no trabajamos y por lo tanto obramos en consecuencia, rechazando la Rendición de cuentas”.
Al mismo tiempo, aseguró no haber encontrado ninguna ilegalidad ya que la hubiesen denunciado en la Justicia, aunque afirmó que siguen sin saber con qué criterios se otorgan las becas o si es una cuestión de méritos. Además no pudieron conocer las nóminas, ni tampoco a quienes y en qué condiciones fueron repartidos los cuatro millones de pesos destinados a este tipo de subsidios.
Otra de las quejas de la edil fue la falta de datos duros otorgados a los concejales, los cuales refieren a gestiones de la Secretaría de Desarrollo Social. “No todos tuvimos el acceso a la información en el mismo tiempo”, indicó, y añadió: “el mes pasado aprobamos una nueva clave del RAFAM, para mí no tan perfecta pero que decidí acompañar, y una semana después la tuvo instalada la secretaría del Concejo Deliberante, una semana luego la tuvo el bloque de Cambiemos, otra más tarde Unidad Ciudadana y a mí me la dieron el viernes por la tarde”.
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