Un conclave en la Gobernación con tono de lanzamiento

Si bien se explica oficialmente como una “reunión de gabinete ampliada”, una suerte de reedición de aquella que hace dos meses se celebró en El Mangrullo, el restaurante-reducto del ministro Alejandro Granados, el cónclave tendrá cierto tono de lanzamiento. Poco antes del mediodía, Daniel Scioli juntará en la Gobernación a unos 300 funcionarios, dirigentes y legisladores que están trabajando en su candidatura presidencial.
Allí se prevé que el mandatario “baje línea” con la idea de ordenar su tropa de cara a la profundización de la estrategia electoral con la mira puesta en las presidenciales del año que viene.
“No habrá lanzamiento porque  Daniel ya está lanzado”, dijeron fuentes del sciolismo, quienes adelantaron que habrá un repaso área por área del Ejecutivo y la necesidad de cumplir en tiempo y forma una serie de obras que se mostrarán como vidriera de gestión.
La idea, más allá de la cuestión motivacional, será unificar el discurso para que cada funcionario “sea vocero y defienda la gestión”.
Aún cuando el sciolismo niegue un lanzamiento sui generis -el encuentro será en la residencial oficial y a puertas cerradas-, la cuestión electoral y la campaña tendrán su propio espacio. Por lo pronto, se especula con que se presentarán nuevas piezas propagandísticas y afiches que empezarán a inundar la Provincia y el resto del país.

Diferenciación  

En tanto, ayer, Scioli ensayó  otro gesto diferenciador del gobierno nacional al visitar la sede de la Unión Industrial Argentina y tender nuevos puentes de diálogo con el sector empresario (ver aparte).
“Coincidimos en la responsabilidad social que tuvimos entre empresarios, sindicatos, y los distintos niveles de gobierno, en cuidar el empleo como un tema central, la productividad y la competitividad. Fue una reunión en términos constructivos, de colaboración, no de confrontación, de debate intenso”, dijo Scioli.