Solá se defiende y desmiente que deje la Provincia con déficit

El gobernador bonaerense, Felipe Solá, desmintió hoy que vaya a dejar un fuerte déficit en la Provincia cuando finalice su gestión, el lunes próximo, aunque reconoció que su sucesor, Daniel Scioli, va a tener que sentarse a negociar con la Nación y deberá "endeudarse un poco" para mantener la obra pública.
Si bien Solá aseguró que Scioli "va a tener caja para estar bien hasta para pagar los salarios de marzo", advirtió que este margen fiscal que deja en la Provincia no le va a evitar tener que "sentarse (a negociar) con la Nación el refuerzo financiero anual".
"El gobierno de Scioli va a tener caja como para estar bien en su comienzo. La idea es llegar a pagar los salarios de marzo", explicó Solá durante un acto en el municipio de Malvinas Argentinas.
Asimismo, alertó que "va a tener los problemas estructurales de la Provincia, porque todos los años se tiene que endeudar un poco para mantener la obra pública".
No obstante, estimó que "a medida que pase el tiempo, va a estar más sólida", aunque consideró que "lo fundamental para la provincia es que no se detenga su crecimiento, que es la clave de todo esto".
En cuanto a la relación que deberá mantener Scioli con la futura presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, sostuvo que "no puede eludir, como no pude yo en seis años, negociar con la Nación el refuerzo financiero anual".
"En los años míos, la Nación apoyó bien a la provincia, aunque eso significa un mayor endeudamiento, pero en la medida que se recauda va bajando", afirmó el gobernador.
Solá entregó al partido de Malvinas Argentinas un subsidio por un millón de pesos para realizar obras públicas.