Especialistas que integran el Subcomité para la Prevención de la Tortura de la Organización de Naciones Unidas (ONU) entregaron a fines de la semana pasada a la Cancillería argentina un informe preliminar y reservado sobre el resultado de la serie de inspecciones que realizó a lo largo del mes de abril en cárceles, comisarías, institutos de menores y hospitales neuropsiquiátricos de la Provincia.
El informe tiene carácter reservado y contiene las principales conclusiones de las recorridas de los visitantes de la ONU sobre lugares de detención de la Provincia, en las que, según trascendió, se constataron varias de las denuncias que vienen motorizando organismos de Derechos Humanos, y de algunos de ellos se habrían llevado “facas” que los entregaron los propios internos.
Si así lo decide, la Cancillería podrá difundir ese trabajo. Con todo, la evaluación del Subcomité contra la Tortura de la ONU hará públicas las conclusiones de sus recorridas en un informe final que se publicará en unos dos meses, según se estima, y en el que además el organismo realizará una serie de recomendaciones al Servicio Penitenciario Bonaerense.
Aunque el trabajo de los inspectores de Naciones Unidas se enmarcó en un fuerte hermetismo, trascendió que durante sus visitas a cárceles y comisarías de la Provincia pudieron constatar algunas de las denuncias que vienen realizando organismos de Derechos Humanos sobre malas condiciones de alojamiento.
En la Unidad Penal de Olmos, por caso, la delegación recibió por parte de un grupo de detenidos armas de fabricación casera, conocidas como “facas”, tal como ocurrió semanas atrás durante una visita del vicegobernador Gabriel Mariotto y el titular del Cels, el periodista Horacio Verbistky, en el complejo penitenciario de San Martín.
Postura
El organismo, sin embargo, ya había tomado postura con respecto al tema semanas atrás a través de otro de los especialistas que la integran, el español Emilio Ginés Santidrián, quien calificó a la situación carcelaria de la Provincia como “sumamente grave”. “Por la información que tenemos, además de los problemas estructurales hay falencias del sistema judicial y altos índices de prisión preventiva”. Realmente el sistema judicial no controla lo que pasa en los lugares de detención”, disparó.
La delegación del subcomité para la Prevención de la Tortura de la ONU, encabezada por su titular Víctor Manuel Rodríguez Rescia, recorrió en forma sorpresiva cárceles y comisarías en el último mes para constatar condiciones de detención, el funcionamiento de los programas de prevención de la tortura, el acceso a atención sanitaria de los detenidos, la provisión de alimentos, el contacto con sus familiares y el régimen diario de encierro, especialmente si existen prácticas de aislamiento como métodos de castigo, los denominados “buzones”.
Los especialistas de la ONU concluyeron una serie de visitas a cárceles, comisarías, institutos de menores y hospitales neuropsiquiátricos de la Provincia, tanto de régimen Federal como bonaerense.
Según confirmó este diario, los inspectores de Naciones Unidas estuvieron en los complejos penitenciarios federales 1, de Ezeiza, y 2, de Marcos Paz, y en el Centro de Detención Judicial (Unidad 28) también de régimen federal. Además, visitaron las unidades 1, de Olmos; 3, de San Nicolás; 30, de General Alvear; 46, de San Martín y la Alcaidía Roberto Pettinato del Servicio Penitenciario Bonaerense.
Las comisarías inspeccionadas de la Policía Federal Argentina con sede en territorio provincial fueron las comisarías 3ª, 15ª, 16ª y 30ª, y de la Policía Bonaerense la comisaría Ensenada 3ª (El Dique); Ensenada 2ª (Punta Lara); Lomas de Zamora 9ª (Parque Barón); Lomas de Zamora 5ª (Villa Fiorito) y la Comisaría de la Mujer y la Familia de La Plata.
Los inspectores de Naciones Unidas también se hicieron presentes en el Centro de Recepción de Menores de Lomas de Zamora, en el Centro Cerrado Almafuerte, en los hospitales neuropsiquiátricos Borda, Moyano y Alejandro Korn (Melchor Romero) y en el Servicio Psiquiátrico Central de Varones (Unidad 20).
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