Axel Kicillof sacó pecho frente al Gobierno nacional. Estuvo en Punta Alta y anunció una inversión millonaria para el puerto de Coronel Rosales para ampliar la exportación de petróleo proveniente de Vaca Muerta. Y, de paso, le dedicó con tono de crítica el anuncio al presidente Javier Milei. “Para los que se llenan la boca de mentiras y chicanas y para los que canchereando terminan arruinado inversiones”, disparó.
El Gobernador contrapuso la inversión de 500 millones de dólares que realizará la empresa alemana Oiltanking, asociada con YPF en la estación portuaria, con la incertidumbre que existe alrededor de la construcción de la planta de gas licuado en Río Negro a partir de la posibilidad de que Petronas se baje del proyecto original.
“Para los que se llenan la boca de mentiras canchereando y terminan arruinando inversiones, nosotros estamos desarrollando la inversión más grande la Argentina en curso, que se acordó con este gobierno provincial, sin ningún régimen provincial. Con una mirada estratégica, con seriedad. Con capacidad de cumplir lo que se dice. En Punta Alta: la puerta de salida de Vaca Muerta en la provincia de Buenos Aires”, aseguró el Gobernador.
La obra consiste en la expansión de la terminal de Puerto Rosales, en Punta Alta. La empresa Oiltanking Ebytem, asociada con YPF, invertirá para darle respuesta al incremento de la producción de petróleo que se proyecta para los próximos años en Vaca Muerta.
Kicillof contrapuso esta obra con la inversión para la construcción de la planta de gas licuado que iban a encarar en forma conjunta la empresa Petronas e YPF. Los malayos están analizando bajarse del emprendimiento, lo que obligará a la petrolera argentina a salir a buscar otros inversores para mantener el proyecto en pie.
En ese marco, el presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, dijo que “no hay que dramatizar” la situación y que la planta igualmente se hará en la zona de Punta Colorada, en la provincia de Río Negro.
La provincia patagónica le ganó la pulseada por la localización a Bahía Blanca, lo que generó una intensa polémica entre Kicillof y el gobierno de Milei. Además, el mandatario bonaerense se refirió al tema con reproches a la Casa Rosada cuando habló de los que “terminan arruinando inversiones”.
YPF ahora busca nuevos socios para la obra que demandaría una inversión estimada en unos 30.000 millones de dólares. Según trascendió, Marín viene conversando también con dos gigantes de la industria del gas licuado. Las petroleras que podrían reemplazar el rol de Petronas son la angloholandesa Shell, las estadounidenses ExxonMobil, Chevron o la francesa TotalEnergies.
COMENTARIOS